Mamá es mamá… ¡y papá es papá!

Los roles en casa cada vez se replantean más y se ajustan a la realidad de cada familia, de cada pareja. Basta ya de acudir a frases de cajón para atribuir responsabilidades.

Por Redacción Cromos

04 de mayo de 2015

Mamá es mamá… ¡y papá es papá!
Foto: Flickr

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Por: Juanita Kremer.

La frase “mi esposo ayuda pero…mamá es mamá”, la he escuchado de todo tipo de mujeres, más ahora que corre mi sexto mes de embarazo. He analizado mucho el tema: he sentido susto, desilusión, rabia, ansiedad… Pensar que todo lo duro se le recarga a la mamá (además del embarazo) me tiene preocupada.

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¿A qué se refiere la gente con ese llamado a que la mamá indiscutiblemente está por encima del papá? Simplemente a que el hombre es una especie de “accesorio” en la crianza de los hijos, sobre todo cuando son bebés.
¿De quién más es la culpa de que esto sea así -en la mayoría de los casos- sino de las mujeres? Si bien los hombres no pueden parir, amamantar y la conexión con sus hijos es prácticamente desde que nacen y no desde la barriga, como en nosotras, las culpables de la influencia de esta frase inútil en la sociedad somos nosotras. Muchas me han dicho que cuando los hijos nacen adquirimos una especie de “súper poderes” que nos dicen cómo manejar las nuevas situaciones que se presentan con esa  personita que nos cambiará la vida desde el primer llanto, pero yo creo que podemos confiar en los hombres para que desarrollen esos “poderes” también. Así como fueron muy competentes para embarazarnos, pueden serlo para encargarse del crío.
Puede que me equivoque y cuando nazca mi hijo tenga la desdicha de repetir la    -por ahora- detestable frase para mí; pero creo firmemente que con estas actitudes y comentarios estamos volviendo al género masculino un poco inútil al no darle la oportunidad del “ensayo y error” con sus niños, y aun peor castrarlos con el odioso “mamá es mamá”.
“Papá es papá y lo fue desde el primer día”, es lo que quiero escucharle a mi hijo. El cambio que ha sufrido la mujer en la sociedad con el paso de los años, el montón de tareas que tiene (trabajar, administrar la casa, cuidar a los hijos…) ha hecho que la crianza de los niños también sufra transformaciones. Ya no somos las mamás de antes que se quedaban todo el tiempo en casa y eso hace que también las dinámicas de los hombres tengan que cambiar, todo debe estar enfocado en educar de la mejor manera a los niños y de darles todo el amor que necesitan para convertirse en personas de buenos sentimientos, que puedan aportarle algo valioso a la sociedad en la que los hemos insertado.

¿A qué se refiere la gente con ese llamado a que la mamá indiscutiblemente está por encima del papá? Simplemente a que el hombre es una especie de “accesorio” en la crianza de los hijos, sobre todo cuando son bebés.

¿De quién más es la culpa de que esto sea así -en la mayoría de los casos- sino de las mujeres? Si bien los hombres no pueden parir, amamantar y la conexión con sus hijos es prácticamente desde que nacen y no desde la barriga, como en nosotras, las culpables de la influencia de esta frase inútil en la sociedad somos nosotras. Muchas me han dicho que cuando los hijos nacen adquirimos una especie de “súper poderes” que nos dicen cómo manejar las nuevas situaciones que se presentan con esa  personita que nos cambiará la vida desde el primer llanto, pero yo creo que podemos confiar en los hombres para que desarrollen esos “poderes” también. Así como fueron muy competentes para embarazarnos, pueden serlo para encargarse del crío.

Puede que me equivoque y cuando nazca mi hijo tenga la desdicha de repetir la    -por ahora- detestable frase para mí; pero creo firmemente que con estas actitudes y comentarios estamos volviendo al género masculino un poco inútil al no darle la oportunidad del “ensayo y error” con sus niños, y aun peor castrarlos con el odioso “mamá es mamá”.

“Papá es papá y lo fue desde el primer día”, es lo que quiero escucharle a mi hijo. El cambio que ha sufrido la mujer en la sociedad con el paso de los años, el montón de tareas que tiene (trabajar, administrar la casa, cuidar a los hijos…) ha hecho que la crianza de los niños también sufra transformaciones. Ya no somos las mamás de antes que se quedaban todo el tiempo en casa y eso hace que también las dinámicas de los hombres tengan que cambiar, todo debe estar enfocado en educar de la mejor manera a los niños y de darles todo el amor que necesitan para convertirse en personas de buenos sentimientos, que puedan aportarle algo valioso a la sociedad en la que los hemos insertado.

Flavia Dos Santos

No veo a los papás tan ausentes, aunque siempre vamos a encontrar grupos machistas que le tienen miedo al hijo, la mujer debe dejar la autoridad en ese sentido, aprender a compartir más. Es un trabajo conjunto. Cada vez se están involucrando más.

Mónica Rodríguez

Aunque vivimos en una sociedad machista, hoy por hoy los hombres son mucho más colaboradores con sus parejas, y aunque hay muchos padres ausentes, también los hay solos y otros que logran, en pareja, participar de la crianza desde la temprana edad de sus hijos.

Alexandra Pumarejo

Las mujeres nos quejamos mucho pero delegamos poco. Queremos que nos ayuden pero solo si lo hacen como nosotras les imponemos. Eso está mal. Hay que confiar y saber que pueden dar el mismo amor que uno.

Por Redacción Cromos

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