"Mercedes es una alquimista", Diego Martínez
“Nos conocimos a finales de julio de 1997 en Bogotá y nos casamos en la pirámide del Sol de Teotihuacán el 9 de octubre de ese mismo año. Mercedes estaba terminando su carrera de joyería en México y pocos meses después estaba de vuelta en Bogotá, donde comenzó compartiendo un espacio de trabajo con otros jóvenes joyeros.
Las piezas que ella diseñaba, en ese entonces, generaban admiración en los demás. Muchas personas preguntaban por sus joyas, querían tenerlas, y eso fue sembrando una idea en mí. Nos pasaba cuando viajábamos, en las fiestas, era una constante. A la gente le gustaba lo que ella hacía.
Un par de años después, sin una marca todavía, montamos la primera exposición de sus diseños en el salón comunal del edificio donde vivíamos con nuestros tres hijos. La muestra, planeada para durar un día, tuvo que prolongarse por dos más debido a la cantidad de gente que la visitó.
Sigue a Cromos en WhatsAppDecidimos entonces participar en Expoartesanías con Mercedes Salazar Joyería y la respuesta del público nos dio la energía para montar nuestro primer taller y showroom en el parque de la 93, que fue sin duda unos de los pilares de la historia de nuestra marca. Hemos trabajado de la mano, hemos viajado por el mundo y hemos construido una empresa donde cada uno tiene claras sus responsabilidades.
Me enamoré de una mujer bella y sensible a la que le encantaba cocinar y he sido testigo de su transformación en la gran diseñadora que es hoy. Mercedes ve cosas donde otros no las ven. Le encantan los mercados populares y perderse en pequeñas calles de diferentes ciudades donde su intuición la lleva a encontrar tesoros, que con el tiempo se convierten en parte de sus colecciones. Acompañarla en esos viajes de búsqueda de tesoros ha sido un placer.
Su pasión por mantener vigentes las técnicas artesanales ancestrales hace parte del ADN de la marca y nos ha permitido conocer lugares y personas fantásticas de Colombia. Estar casado con una artista me ha permitido ver las cosas con otros ojos. Ha sido una universidad de colores, historias y texturas.
Mercedes es versátil, tiene excelente memoria. No la trasnochan los temas tecnológicos, tiende a ser solitaria a pesar de que su carrera le exige ser social. Ella es más de su casa, de su finca, de su taller. Le gusta la lectura y estar en contacto con el trabajo de otros artistas.
En el taller, con sus artesanos o en su casa con nosotros, su capacidad de transformar es evidente. Para mí, Mercedes es una alquimista”.
- Se casaron en julio de 1997.
- Tienen tres hijos: Lorenza, de 16 años, Antonio de 15 y Ana Perla de 13. Todos nacieron entre 1998 y 2002.
- Diego es abogado de profesión, pero ha ejercido como empresario.
- El cuidado de su familia es lo principal en la vida de los empresarios quienes toman las decisiones del hogar en conjunto, evitando que uno de los dos tenga la última palabra.
Foto: Daniel Álvarez.