SYOU, zapatos que cuentan historias

¿Qué significa para usted ser colombiano? Esta es la pregunta que dos holandeses se atrevieron a publicar en redes sociales a principios de este año. Sus nombres: Merjin Ten Thije y Jaap Spoorenberg. Hace tiempo tenían a Colombia en la mira para incluirla como segundo destino de SYOU, un concepto que busca estimular la creatividad, impulsar la economía y cambiar la popularidad de países que no tienen una imagen positiva en el exterior.

Para su sorpresa y felicidad, ocho mil personas contestaron. Con esta cifra sobre la mesa, no dudaron empacar sus maletas y venir al país en busca del que sería el equipo oficial de SYOU Colombia. Con el antecedente exitoso de SYOU África, con Burkina Faso como sede principal para la creación y producción de la primera línea de tenis ciento por ciento africanos, llegaron a Medellín con la firme intención de dejarse sorprender. Se encontraron con artistas urbanos, visuales y plásticos; músicos, cineastas y escritores dispuestos a vender su idea de qué significa ser colombiano.

Merjin Thije es el cerebro detrás del proyecto. Se le ocurrió durante una pasantía en la sede europa de Nike, en 2006.

Había tanta tela de dónde cortar que, para escoger al equipo de cinco ganadores, Merjin y Jaap, con ayuda del jurado invitado (los periodistas de moda y culturales Mono Casas, Catherine Villota y  Beatriz Mesa; los diseñadores Darío Cárdenas y Daniel Hoyos; José Sarralde, director de la Fundación Cartel Urbano; el artista urbano Gris Álvarez y el artista visual Julián Charms), redujeron la lista a 29 finalistas, a quienes invitaron a Medellín para la prueba final. Lo que pasó en la capital antioqueña solo puede describirse cómo mágico.

Durante dos días, el equipo de producción de SYOU y los participantes se desplazaron por la ciudad a bordo de una chiva en busca de inspiración. Fueron testigos de la dinámica de Medellín: pudieron ver qué pasa en sus calles, qué colores las adornan, compartieron con su gente, entendieron qué los motiva. Se subieron en el metro hasta la Comuna 13 y en las Escaleras Eléctricas, donde líderes culturales les enseñaron cómo en Medellín se vive y se vibra con el arte.

Una vez terminaron el recorrido, empezó lo que ellos llaman las sesiones de creatividad. Era el momento para que cada uno de los 29 finalistas plasmara a través de palabras, colores, pinturas, equipos de tecnología, e, incluso, material de reciclaje, lo que para ellos significa ser colombiano. ¿El resultado? Se puede resumir en dos palabras: raíces y libertad.

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Osadía Nacional. Este es uno de los tres diseños de la colección. Tanto las cajas como los estampados de los zapatos reflejan la alegría y viodiversidad que caracterizan a Colombia.

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Ambas fueron el común denominador de las propuestas de Juanita Olivera, José Argotty, Juan Diez, Diego Chávarro y Santiago Oliveros. Todos estuvieron de acuerdo en que un colombiano es aquel que siempre busca encontrar nuevos caminos sin olvidar nunca de dónde vino. Cada uno en su lenguaje, supo aportarle a SYOU su visión de Colombia. Juanita, la escritora del grupo, es la encargada de escribir los poemas que aparecen en cada una de las plantillas; José aprovechó sus trabajos previos  de técnicas manuales con comunidades indígenas del sur del país, para diseñar las cajas de los tenis; Juan fue el encargado de codiseñar la imagen corporativa de esta línea de zapatos; Aeroesferas creó el documental que apoya la imagen de SYOU; Diego Chávarro fue quien tuvo a cargo las fotografías oficiales de la campaña.

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Negocio Familiar. La empresa Hormas Unidas, dirigida por Martín y Jaime Estrada, fue la encargada de desarrollar las hormas especiales para esta colección.

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Pero, ¿qué significa la palabra SYOU? Según sus dos fundadores, es una abreviatura de ISEEYOU (te veo), que representa el hecho de que reconocen el talento que existe en el mundo, en este caso Colombia. Para sustentarlo se aseguran de que todo el proceso de la colección sea cien por ciento colombiano, con materiales cien por ciento nacionales. «A diferencia de los gigantes de la industria, nosotros producimos localmente, de una manera ética, que no comprometa la calidad», explicó Merjin durante el lanzamiento oficial en Colombiamoda.

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Para inspirarse. La escritora bogotana Juanita Olivera fue la encargada de escribir los poemas que aparecen en cada una de las plantillas. Cada una es una invitación a recorrer Colombia.

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Como empresa, SYOU cree en el comercio, no en el auxilio. Para ellos la clave del éxito está en promover un trabajo equitativo, de cocreación, en la que todos los involucrados salgan ganando. «Nuestras ventas son a través de la plataforma en línea, algunos pop-up stores o cadenas de tiendas seleccionadas cuidadosamente, así el margen de utilidades no se pierde en los intermediarios». Es así como además de la convocatoria artística, SYOU buscó talento local para que se encargara de toda la producción. Aunque todo el proceso de fabricación se llevó a cabo en Cali, las hormas y moldes fueron hechos en Medellín; las telas de las bolsas hechas a mano con algodón orgánico vienen de Bogotá.

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El empaque también habla. La fundación Solidaridad por Colombia estuvo a cargo de la confección de las bolsas de tela que cargan toda la filosofía de co-creación de SYOU.

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Fotos: Cortesía SYOU