Flavia dos Santos habla sobre el empeoramiento del desempeño sexual de los hombres. Según la sexóloga, aunque las mujeres han avanzado en la reivindicación de su placer y autonomía sexual, muchos enfrentan desafíos que afectan su rendimiento en la intimidad. “Las mujeres ya no están dispuestas a sacrificar sus tiempos y mucho menos su gratificación sexual, lo que nos llevaría a creer que hombres y mujeres finalmente están en la misma página”, expresó la psicóloga.
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Uno de los factores que contribuyen a esta situación es la presión que la sociedad patriarcal ejerce sobre los hombres, imponiéndoles estándares rígidos sobre su desempeño sexual. Se les exige estar siempre dispuestos, mantener erecciones prolongadas y centrarse en la penetración como principal fuente de placer. Esta presión puede llevar al consumo indiscriminado de medicamentos para la disfunción eréctil: “El mismo patriarcado que tanto mal hace a las mujeres, los estimula a solo tener sexo por tener, ya que les exigen números y no deseo, o al consumo desenfrenado de pastillas azules para garantizar ese pene erecto a todo momento, y junto a eso un adoctrinamiento concentrado en la penetracion, desestimando el cuerpo como fuente de sensaciones tan poderosas para llegar al orgasmo”.
Sigue a Cromos en WhatsAppLa falta de educación sexual integral y la ausencia de comunicación sobre deseos y expectativas también juegan un papel en el deterioro del desempeño sexual masculino. Dos Santos destaca que muchos hombres “van por la vida creyendo que por el hecho de que tienen un pene lo tienen todo, lo que genera ansiedad ante cualquier dificultad, como la pérdida ocasional de la erección”.
Para mejorar esta situación, es fundamental que los hombres cuestionen los estereotipos de la masculinidad tóxica y se permitan explorar su sexualidad de manera más abierta y consciente. Esto implica reconocer que el placer no se limita a la penetración.
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Abordar estos problemas requiere una reflexión profunda sobre la masculinidad, la promoción de una comunicación abierta y la educación en sexualidad que permita relaciones más saludables y placenteras para ambos miembros de la pareja. “La falta de erección, común y normal en cualquier hombre del mundo, les afecta la autoestima y muchas veces la misma relación de pareja, porque lo más fácil es alejarse por creer que el pene flácido lo cancela como un ‘hombre de verdad’”, dijo Dos Santos.
En cuanto al consumo excesivo de pornografía, Flavia sostuvo que es mejor evitarlo por una razón: “Serían mucho mejor en la cama si no acudieran tan a menudo al porno como ideal de sexualidad y solución para fantasías eróticas. Falta diálogo, falta educación sexual y, sobre todo, falta cuestionar ese discurso machista que encasilla al hombre y lo lleva a un sufrimiento solitario”.
*Texto hecho con ayuda de la IA.
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