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Qué importante para la vida futbolística de James Rodríguez y para la selección colombiana que dirige el técnico argentino Néstor Lorenzo, que el “10” se encuentre jugando de manera frecuente con su equipo, el León de México. Eso es clave para que llegue con más ritmo de juego a los próximos partidos de eliminatorias al Mundial 2026 y evitar comentarios en contra de su convocatoria.
Gestionar conflictos implica tener la habilidad de ayudar a otros a superar situaciones emocionales o tensas, hacer aflorar con tacto desacuerdos subyacentes y definir soluciones que todos puedan respaldar.
Según el técnico del club León de México, Eduardo Berizzo, antes de contratar a James Rodríguez se asesoró de su paisano Néstor Lorenzo, técnico de la selección de Colombia, para tener conocimiento más allá de lo que él sabía, en lo técnico, en lo táctico, en lo físico y en la parte interpersonal e intrapersonal del jugador en mención, para generar estrategias de trabajo para con él y el resto de compañeros de equipo.
James, en su saber y comprender, ha demostrado estar comprometido con el proyecto dentro y fuera del terreno de juego. Quiere ayudar a sacar adelante al equipo y ha recibido la aceptación general de la hinchada, una manera de generar estabilidad integral a su alrededor.
Lo más importante es que el proceso continúe así para que nuestro James siga en ascenso futbolístico y nos siga dando tantas alegrías, que lo beneficiarán a él, a su club y a la selección de Colombia.