Todo empezó en la parte alta de la tercera entrada. Una barrida en segunda base de Tyler Austin, pelotero de los Yanquis de Nueva York, para evitar una doble matanza. Con su pie izquierdo le pegó al campocorto de los Medias Rojas Brock Holt, quien se molestó por la acción. La discusión inmediatamente se acaloró y las bancas de ambos equipos se vaciaron para evitar que las cosas pasaran a mayores. Los umpires realizaron una advertencia, pero la chispa había quedado encendida.
En la parte alta de la séptima entrada, con el partido 10-6 a favor de los Yanquis, el lanzador de Boston Joe Kelly hizo que esa chispa estallara. Con Austin bateando, le lanzó una recta al cuerpo y falló. No logró conectarlo. En el segundo intento lo conectó: un bolazo a la altura de las costillas. El bateador de la novena de Nueva York reaccionó golpeando el bate contra la tierra. No había vuelta atrás, lo que comenzó con una barrida para cortar una doble matanza y pudo ser detenido, en ese momento ya tenía tintes de pelea. Y fue cuando Kelly, sin pensarlo mucho, le hizo un gesto retador al pelotero de los Yanquis, quien se fue encima de él a toda carrera.
Benches clear, punches thrown in Yankees-Red Sox after Tyler Austin is hit by a pitch from Joe Kelly. pic.twitter.com/wvqoak8QMV
— MLB (@MLB) April 12, 2018
En medio de la gresca el jardinero derecho de los ‘Bombarderos del Bronx’, Aaron Judge salió corriendo al centro de la pila, donde estaban Austin y Kelly, para intentar separar a ambos jugadores. “Vi que Kelly estaba encima de Tyler después de que trató de atacarlo, así que mi trabajo era simplemente levantarlo y sacarlo”, dijo Judge. “A nadie le gusta ser golpeado con una recta de 98 en la espalda. Todo el mundo estaba muy molesto por eso”.
En medio de la pelea y con la cabeza gacha Tyler Austin lanzó golpes sin ver a quien conectaba, las cámaras capturaron que uno de esos había terminado en la cabeza del coach de tercera base de los Medias Rojas, Carlos Febles. “Estaba tratando de defenderme. Eso era todo”, afirmó el jugador de Nueva York en diálogo con MLB.
Holt, con quien comenzaron las diferencias entre Yanquis y Medias Rojas, lamentó lo sucedido. “Probablemente dije algo que no tuve que haber dicho”, afirmó. “Lo siento por eso. Solo quería que supiera que fue un mal deslizamiento. Creo que todos en el campo saben que así fue”, añadió. Aunque el resto del juego transcurrió sin incidentes, la tensión se mantuvo alta sobre todo en el dogout visitante. Al final, Nueva York ganó 10-7 y le cortaron una racha de nueve victorias consecutivas a los Medias Rojas de Boston.