
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Los grandes candidatos al podio final aún no se han mostrado las uñas, como si se tratara de una pelea de boxeo en la que los primeros asaltos son para probar al rival. Al racimo de grandes favoritos sólo le falta un nombre, el de Joaquim Rodríguez, que se tuvo que ir con un dedo fracturado y tres costillas desvencijadas.
La lista de las apuestas iniciales, que nos da una idea de lo que piensan los aficionados europeos, no ha cambiado: Nairo (máximo favorito) paga por euro 2.10, Evans 3.25, Urán 5.50, Pozzovivo 8.5, Majka 21 y más de 40 euros se ganarían con Kelderman, Rolland, Aru y Basso. La impresión que existe entre los especialistas del ciclismo es que los grandes hasta ahora se han limitado a ahorrar fuerzas pensando en la tercera semana, cuando llegarán las más duras jornadas de montaña. El único que buscó agrandar la distancia con sus rivales fue Cadel Evans al aprovechar una caída masiva para ganar algunos segundos.
Este martes tendrán su oportunidad los rodadores y los embaladores. El miércoles los que bajen bien pues tras un puerto de segunda categoría, a 23 kilómetros de la meta, habrá un descenso muy pronunciado que permitirá el triunfo de los que más arriesguen.
El jueves podremos saber en qué condiciones andan los favoritos en una etapa a cronómetro de 41.9 kilómetros, con un premio de cuarta categoría hasta el kilómetro 12.6, luego un descenso suave y al final dos cortos ascensos. Ninguno de los primeros de la general podrá guardarse nada por lo que el reloj nos servirá para comprobar cómo van de fuerzas.
Y el sábado vuelve la gran montana en la etapa a Oropa, de 164 kilómetros, con un ascenso al salir de 30 kilómetros hasta un puerto de tercera categoría, luego en el kilómetro 95 uno de primera en Alpe Noveis, descenso y de nuevo a subir hasta el kilómetro 122 a un alto de segunda y al final una llegada con una cumbre de primera categoría.
El domingo una larga etapa de 225 kilómetros con 205 sin mayores desniveles y una subida final de primera categoría a Montecampioni . Dos fracciones exigentes antes del tercer día de descanso.
Hasta el momento Urán y Quintana han respondido. Ninguno de ellos se ha mostrado demasiado y hasta ahora se los ha visto pedalear cómodos y tranquilos en los ascensos. Existía algún temor por las lesiones sufridas por Nairo el día de la gran caída, especialmente por un golpe en la cadera que lo molestó bastante dos días, pero la calma vuelve a su equipo que, sin embargo, está haciendo agua. A los grandes puertos no llega con él ninguno de sus compañeros y por ello hay que pensar que Arrieta y Unzúe, sus técnicos, van a esperar a la última semana para intentar conquistar la camiseta rosada ya que la escuadra no tiene con qué echarse encima el peso de la carrera.
Por ahora el rival de los colombianos es el actual líder, Cadel Evans, pero habrá que tener en cuenta a dos corredores jóvenes que están en la gran batalla, el polaco Rafal Majka (el que le peleó hace un año la camiseta de los jóvenes a Betancur) y el italiano Fabio Aru.