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En medio del Tour de Francia 2025, mientras Tadej Pogacar consolida su dominio en la clasificación general y deja atrás a Jonas Vingegaard, el estadounidense Lance Armstrong, hace unos días, no escatimó elogios hacia el esloveno.
En su reconocido pódcast The Move, el excampeón —que fue desposeído de sus títulos (entre 1999 y 2005) por dopaje— se mostró maravillado por el rendimiento del líder del UAE Team Emirates.
“Más allá de algún drama, Tadej Pogacar volvió a demostrar que no es que sea el mejor ciclista de esta generación, sino que probablemente sea uno de los mejores de la historia”, sentenció Armstrong, acostumbrado a medir las palabras cuando se trata de comparaciones históricas.
“Pogacar es una bestia”: Amstrong
El texano valoró especialmente la forma en que Pogacar ha manejado las dificultades a lo largo del Tour, incluyendo caídas, ataques rivales y exigencias tácticas. “Pogacar fue capaz de superar la caída, acabar delante, demostrar que es el mejor. Es una bestia”, afirmó.
Y añadió, con tono admirativo: “Estoy realmente impresionado con Pogacar, e incluso algo envidioso con lo bonito que es ser joven. He estado en el mismo sitio que Pogacar... cuando quería, los atropellaba, pasaba por encima”.
Armstrong no solo destacó el talento individual de Pogacar, sino también la superioridad del equipo UAE, que ha marcado la pauta en etapas clave. “Es el capo. No ha sido la misma actuación del año pasado, y eso lo agradecemos los espectadores, pero ha sido dominante también por parte de su equipo. Tres o cuatro tipos tirando en cabeza de un pelotón reducido. Eso habla del enorme dominio de UAE, una gran demostración”, analizó en su pódcast, donde también recordó sus propias experiencias como líder de escuadra.
Que es el mejor de la historia no es algo que Amstrong ha dicho solo en su podcast, pues ya lo mencionó también en otros espacios.
La comparación con sus años de gloria parece inevitable: Armstrong ve en Pogacar una figura que va más allá del talento natural y que impone respeto con su inteligencia táctica y capacidad física. A pesar de la competencia cada vez más cerrada en el pelotón, el esloveno ha sido capaz de imponer un ritmo implacable, incluso en días complicados, como ocurrió en las primeras etapas de alta montaña o tras su caída en la segunda semana.
Las palabras de Armstrong, aunque controvertidas por su pasado, suelen tener eco en el mundo del ciclismo. En este caso, sus declaraciones reafirman la sensación generalizada: Pogacar no solo está ganando el Tour, lo está haciendo con una mezcla de clase, fuerza y resiliencia que lo proyecta como una leyenda en construcción. Mientras el pelotón sigue su camino hacia París, muchos ya se preguntan si están viendo al mejor corredor de la era moderna.
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