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El belga Remco Evenepoel, de apenas 20 años de edad, se impuso este jueves en solitario en la subida al Picón Blanco, primer test de montaña en la reanudación de la temporada ciclística, en la tercera etapa de la Vuelta a Burgos.
Evenepoel, vencedor con veinte segundos de ventaja sobre el neozelandés George Bennett, tomó el mando en la general de la prueba, que terminará el sábado. El fenómeno belga brilló en la última subida, de ocho kilómetros, pero con una pendiente de 9,3% de promedio.
Evenepoel, que pasó al ataque a dos kilómetros de la cima, aumentó las diferencias respecto a otros favoritos. El español Mikel Landa, tercero de la etapa, perdió treinta segundos, un par menos que Chaves, mientras que el ecuatoriano Richard Carapaz unos 50, en esta primera de las dos llegadas en altura de esta Vuelta a Burgos.
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El belga, ganador de la Clásica de San Sebastián el año pasado en su primera temporada en el pelotón profesional, respondió magistralmente a los interrogantes sobre su nivel en la montaña. Confirmó así que puede ser uno de los grandes protagonistas del próximo Giro, la primera gran ronda de su carrera.
El viernes, los velocistas como Fernando Gaviria tendrán una oportunidad en la cuarta y penúltima etapa, de 163 kilómetros, entre Bodegas Nabal (Gumiel de Izán) y Roa de Duero.
El colombiano Esteban Chaves fue cuarto en la etapa aunque atacó a 2 kilómetros de la meta, pero fue capturado por el belga Evenepoel, quien fue en búsqueda de la victoria atacando y mantuvo la diferencia hasta cruzar primero la meta.