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La organización de la Vuelta a España decidió rescatar a 91 corredores que llegaron fuera de tiempo en la etapa 15. No fue una fracción fácil. Aunque fue corta, muchos corredores sintieron el esfuerzo realizado el día anterior en la llegada a Aubisque. Ese puerto fuera de categoría que estalló a muchos ciclistas el sábado. Los colombianos Darwin Atapuma y Jhonatan Restrepo estuvieron dentro de esa camada.
“El colegio de comisarios, después de haber oído a los directores de la organización, a los directores técnicos de la prueba y teniendo en cuenta la opinión del representante de la AIGCP (Asociación Internacional de Grupos Ciclistas Profesionales), ha decidido que sería perjudicial para la imagen del ciclismo si la 71ª edición de La Vuelta sólo contara con la participación de 71 corredores a partir de la etapa 16”, fue la explicación que dio la organización para no dejar la carrera patas arriba. Todos esos corredores llegaron a 53,38 minutos del ganador, Gianluca Brambilla, cuando el límite de tiempo estaba establecido en 31,24 minutos.
Además de los colombianos, entre los corredores también se encontraba prácticamente todo lo que queda del equipo Sky, menos Chris Froome. "Tras hablar con los comisarios e informar a la asociación de equipos, se ha tomado la decisión de rescatar a esos corredores para no dañar la imagen del ciclismo y la de los equipos", señaló el director de la Vuelta, Javier Guillén.
El ataque de Contador y Quintana, nada más comenzar la etapa, cogió desprevenido a la mayoría del pelotón que decidió, vista la incapacidad para alcanzarlos, seguir a tren aún a riesgo de llegar fuera de tiempo. Un grupo tan grande no podía ser excluido. La presencia de los ciclistas del Sky en ese autobús de cola también pesó porque, de lo contrario, la Vuelta habría finalizado.