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El océano Atlántico baña la costa de esta ciudad que estuvo bajo el dominio de los boers holandeses hasta el siglo XVII. Hoy, Ciudad del Cabo es un lugar cosmopolita en el que conviven blancos, negros y turistas de todo el planeta. En Waterfront, ese muelle cargado de restaurantes con reminiscencia europea; en Camp Bay, una pequeña Miami Beach; o en el mismísimo centro, donde los impresionantes rascacielos contrastan con Mountain Table, la tercera atracción de este rincón de África después del Paul Kruger Park y la bahía de esta urbe. Aquí, precisamente, Alemania intentará batir a Argentina. Y uno de los futbolistas clave del equipo que conduce Joachim Loew puede ser el mediocampista Thomas Müller.
Es muy especial este encuentro para el hombre del Bayern. Se observa en la concentración qué tiene este pibe de 20 años. La escena se produjo este viernes, en las playas de Camp Bay. Los aficionados argentinos, que son unos siete mil, quisieron sacarse fotos con él. Sin embargo, el alemán les dijo “no” con un espíritu anticeleste y blanco que molestó. Lejos de inquietarse, Müller se subió al bus que trajo al plantel hasta estas tierras y volvió a la concentración del equipo. Hay otra historia que vincula a este talentoso futbolista con la selección de Argentina: en marzo, cuando se jugó el amistoso en Munich entre los protagonistas de este duelo de cuartos de final, Müller brindaba una conferencia de prensa cuando Maradona irrumpió en la sala. “¿Quién es este niño?”, comentó. Y se negó a hacer declaraciones. Hasta que cayó en la cuenta de que se trataba de este mediocampista teutón que fue impulsado al subcampeón de la Champions League por Klinsmann, aquel prestigioso goleador de Alemania. Con el holandés Louis van Gaal en el banco, Müller la rompió. Por eso esta tarde, el sueño es voltear al último favorito de Suramérica.
¿Esperaba vivir este momento? Es titular en el equipo alemán y está ante un partido de esos que son decisivos...
Todo me pasó rápido. En un abrir y cerrar de ojos, me encontré con esta posibilidad. Es el sueño de cualquier jugador poder participar de una Copa del Mundo. Siento que cumplí un sueño. Pero de nada servirá mi satisfacción si no pasamos a las semifinales.
¿No le pesa el hecho de llevar el mismo apellido que Gerd, el bombardero, aquella figura alemana que brilló en la década del setenta?
El apellido es el mismo, pero somos diferentes. A Gerd lo conozco de las inferiores del Bayern. Pero a mí me falta mucho por aprender. Hace poco me elogió. Que lo haya hecho un delantero tan contundente como él, me llena de un profundo orgullo.
¿Cómo evalúa el nivel de Alemania? Porque se produjeron algunas dudas, especialmente después de la derrota ante Serbia.
Creo que hemos mejorado. El equipo fue creciendo. Y ahora, que llegamos a los cuartos de final, estamos en un buen momento para ratificarlo ante un rival que es candidato a ganar el título y que tiene mucha historia en los Mundiales.
¿El triunfo ante Inglaterra les dio un plus de confianza?
Ganar por un resultado tan abultado fue muy importante para nosotros. Es una locura hacerle cuatro goles a los ingleses.
Sus dos goles fueron clave.
Marcar esos dos goles nos permitió distanciarnos en el marcador ante una Inglaterra que nos estaba presionando. Todo el equipo firmó una gran actuación, no sólo yo. Si no fuera por mis compañeros, no estaríamos ante esta posibilidad de jugar con Argentina.
¿Cuál es la principal virtud de Argentina?
El riesgo es que Messi explote justo en este momento. Él es un jugador extraordinario, de los mejores que hay en este Mundial. Y aunque no haya jugado en su mejor nivel, seguramente puede ser decisivo. Sobretodo si se despierta. Hay que tener mucho cuidado.
Habló de Messi. ¿Y qué opina de Demichelis, su compañero en el Bayern Munich?
Es uno de los jugadores más regulares de Argentina. Conocemos sus mañas. Vamos a ver si podemos aprovechar para ganar. No es un jugador fácil para el delantero rival. Lo conocemos muy bien.
¿Cómo se le gana a una selección tan fuerte?
Jugando como lo hicimos hasta ahora, teniendo la pelota y aprovechando los momentos para definir el partido. Creemos que si jugamos contra Inglaterra, no tendremos problemas en pasar de ronda.