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Resulta curioso que el futbolista más exitoso en la historia de Atlético Nacional sea un argentino. Especialmente porque durante más de 15 años, entre 1987 y 2004, el club antioqueño recuperó la política de los puros criollos, esa que fue su consigna en las primeras temporadas en el profesionalismo y que poco a poco sucumbió ante la necesidad de reforzarse con jugadores del sur del continente para poder pelear campeonatos.
Hace 14 años, luego de un período poco exitoso en el aspecto deportivo, los dueños de la institución decidieron volver a contratar futbolistas y entrenadores foráneos. En el último tiempo han pasado 35 jugadores extranjeros por Nacional (Ver gráfico abajo) y aunque algunos han triunfado, un buen número pasó sin pena ni gloria.
Eso sí, apenas ahora un proyecto tiene tan marcado el acento argentino. El nuevo técnico, Jorge Almirón, decidió jugársela por cuatro compatriotas suyos como base del plantel que tiene como objetivos pelear los títulos de la Copa Libertadores y la Liga Águila. El camino no arrancó muy bien. La derrota ante Millonarios en la Superliga fue un duro golpe para la afición verde, acostumbrada a imponerse en las instancias definitivas ante uno de sus más tradicionales rivales.
“Estamos trabajando duro para implementar lo que queremos. No es fácil. Un estilo no se consigue de la noche a la mañana, pero hay cosas que se van viendo y que nos animan a seguir”, aseguró Almirón previo al juego de hoy, desde las 7:05 p.m. en el estadio Atanasio Girardot de Medellín, ante el América de Cali, en otro clásico histórico en el balompié local.
En ese duelo, antes del debut en la Copa Libertadores ante el Colo-Colo chileno, el próximo martes, será una gran oportunidad para que Almirón, Fernando Monetti, Diego Braghieri, Gonzalo Castellani y Marcelo Rafael Delgado, los argentinos de Nacional, demuestren que tienen con qué triunfar y se quiten de sus espadas el peso del recuerdo de un exitoso que se fue hace apenas un mes, tras haber ganado 13 títulos vestido de verde: el arquero Franco Armani.
“Acá la exigencia siempre es máxima. No para nosotros los extranjeros, sino para todos los futbolistas y empleados del club. Eso pasa en los equipos grandes en todo el mundo. Lo único que sirve es ganar y para eso vinimos”, explicó Castellani, quien por ahora es el que mejor imagen ha dejado.
Triunfar no será fácil para ellos, como no lo fue para los 31 extranjeros que los antecedieron. De esa lista, varios salieron campeones, pero muy pocos dejaron su sello en el club y se ganaron el cariño de la hinchada. Además de Armani, tal vez Sergio Galván Rey, Gastón Pezzuti y Alejandro Guerra.
Luego de los exitosos procesos con Juan Carlos Osorio y Reinaldo Rueda, el cuadro verdolaga le apuesta a un proyecto argentino con la ilusión de que deje huella como el de hace 40 años con Oswaldo Juan Zubeldía y que fue la base del que es hoy el club más ganador del fútbol colombiano.
