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El primer condimento de la noche fue la no inclusión de Andrés Cadavid a la convocatoria de Independiente Medellín. El ruido de afuera pudo más. La presión estalló: tuvo que verlo desde la tribuna. El defensor, clave en el engranaje del cuadro antioqueño, vinculado con el grupo criminal La Terraza, vio el juego desde la tribuna. Juego luchado, entretenido, que terminó en empate 2-2 ante el Deportivo Cali en Palmaseca en la ida de la final de la Copa Colombia.
El DIM afrontará este miércoles la vuelta con la ventaja de cerrar en casa y sacar un empate de visita. El premio a no esconderse, a esa filosofía conservadora. El equipo de Aldo Bobadilla salió a proponer. La cosecha llegó a los 10 minutos gracias a un cabezazo de Didier Moreno tras un buen centro de Deiner Quiñones. Incertidumbre en Palmaseca.
Pero Déiber Caicedo, una de las joyas juveniles de los azucareros, fue rebelde. Aceleró, dio pausa, decretó el desorden en la defensa rival. Y así, con un centro quirúrgico a Dinenno, llegó el empate antes del final de la primera parte. El nacido en Barbacoas hace 19 años fue la figura del encuentro.
A los 48', de penal, Germán Ezequiel Cano volvió a poner arriba en el marcador al Medellín. Quinto gol en el torneo para el goleador del certamen y quien espera, por fin, celebrar su primer título en el cuadro antioqueño. ¿Podrá?
Y siete minutos después Féiver Mercado dejó cifras concretas en Palmaseca aprovechando un rebote tras un tiro libre que fabricó Caicedo. Todo se definirá el próximo miércoles. Eso sí, discutido arbitraje de Nicolás Rodríguez.