Junior 2-1 Itagüí: el campeón frenó al líder
Victoria reconfortante para un 'tiburón' que venía de un momento difícil, sin embargo, las 'águilas' aún son líderes.
Golcaracol.com
La pelota quieta fue la fórmula para que el campeón reinante del fútbol colombiano lograra superar al hasta este juego invicto líder del torneo. Junior propuso todo el partido buscando la victoria, pero el esquema defensivo de Itagüí se mostró sólido e incluso peligroso en el contragolpe, y sólo dos jugadas a balón parado pudieron desequilibrar.
Un penal al minuto 39 fue el primer golpe. Luis Carlos Ruiz, que hasta ese momento era el hombre del desequilibrio en el local, fue derribado en el área por Joe Luis Raguá y el cobro se hizo efectivo gracias a Giovanni Hernández.
Sin embargo, hasta ahí el que ganaba la mano en lo táctico era Hernán Torres que, de no ser por esa falta, habría dejado maniatado a un rival que tenía la pelota pero no sabía qué hacer con ella.
La falta de profundidad de Junior, su poca pegada, hizo que muchos volvieran a señalar a Luis Páez quien, a pesar de no estar cerca al gol y de que sus promesas religiosas no sirvieran, hizo un interesante trabajo de desgaste en la punta para que los Hernández, Quiñones y sobre todo Ruiz llegaran de atrás.
Lo duro para Junior fue que, después de sufrir tanto por ese gol, la visita lo empató en el último minuto de la primera parte en una jugada polémica, donde al parecer hubo un fuera de lugar que los defensas tiburones se quedaron reclamando con el brazo arriba mientras Efraín Viáfara ponía el 1-1.
El segundo tiempo fue igual: Junior proponiendo sin asustar en serio, e Itagüí aguantando y contragolpeando cada vez con más espacios.
Sólo otra pelota quieta sacó al tiburón de problemas: un tiro de esquina de Giovanni Hernández encontró solo, sin marca, a Anselmo de Almeida quien cabeceó a placer para el 2-1. El error increíble de la defensa itagüiceña fue cobrado por el central brasileño al minuto 72.
Después vino el drama, y no sólo porque la visita tuvo posibilidades de empatar (lo que se comió López en el minuto 82 solo frente al arco no tiene nombre), sino por el golpe que sufrió Héctor Andrés Quiñónez. El buen lateral del Junior salió inconsciente del campo de juego y tuvo que ser reemplazado. Afortunadamente después de unos minutos se recuperó, pero igual será evaluado por el cuerpo médico para ver su progreso.
Lo cierto es que Junior volvió a ganar y llegó a 8 puntos, mientras Itagüí dejó su invicto en el Metro, pero salió con 11 puntos que, hasta que jueguen Huila, Tolima y Nacional, aún le sirven para estar en la parte de arriba de la tabla.
La pelota quieta fue la fórmula para que el campeón reinante del fútbol colombiano lograra superar al hasta este juego invicto líder del torneo. Junior propuso todo el partido buscando la victoria, pero el esquema defensivo de Itagüí se mostró sólido e incluso peligroso en el contragolpe, y sólo dos jugadas a balón parado pudieron desequilibrar.
Un penal al minuto 39 fue el primer golpe. Luis Carlos Ruiz, que hasta ese momento era el hombre del desequilibrio en el local, fue derribado en el área por Joe Luis Raguá y el cobro se hizo efectivo gracias a Giovanni Hernández.
Sin embargo, hasta ahí el que ganaba la mano en lo táctico era Hernán Torres que, de no ser por esa falta, habría dejado maniatado a un rival que tenía la pelota pero no sabía qué hacer con ella.
La falta de profundidad de Junior, su poca pegada, hizo que muchos volvieran a señalar a Luis Páez quien, a pesar de no estar cerca al gol y de que sus promesas religiosas no sirvieran, hizo un interesante trabajo de desgaste en la punta para que los Hernández, Quiñones y sobre todo Ruiz llegaran de atrás.
Lo duro para Junior fue que, después de sufrir tanto por ese gol, la visita lo empató en el último minuto de la primera parte en una jugada polémica, donde al parecer hubo un fuera de lugar que los defensas tiburones se quedaron reclamando con el brazo arriba mientras Efraín Viáfara ponía el 1-1.
El segundo tiempo fue igual: Junior proponiendo sin asustar en serio, e Itagüí aguantando y contragolpeando cada vez con más espacios.
Sólo otra pelota quieta sacó al tiburón de problemas: un tiro de esquina de Giovanni Hernández encontró solo, sin marca, a Anselmo de Almeida quien cabeceó a placer para el 2-1. El error increíble de la defensa itagüiceña fue cobrado por el central brasileño al minuto 72.
Después vino el drama, y no sólo porque la visita tuvo posibilidades de empatar (lo que se comió López en el minuto 82 solo frente al arco no tiene nombre), sino por el golpe que sufrió Héctor Andrés Quiñónez. El buen lateral del Junior salió inconsciente del campo de juego y tuvo que ser reemplazado. Afortunadamente después de unos minutos se recuperó, pero igual será evaluado por el cuerpo médico para ver su progreso.
Lo cierto es que Junior volvió a ganar y llegó a 8 puntos, mientras Itagüí dejó su invicto en el Metro, pero salió con 11 puntos que, hasta que jueguen Huila, Tolima y Nacional, aún le sirven para estar en la parte de arriba de la tabla.