Millonarios mejora en ataque, pero empeora en defensa

Jorge Luis Pinto, técnico de Millonarios. / Óscar Pérez

Decía el exfutbolista y técnico brasileño Elba de Pádua Lima, conocido como Tim, que “el fútbol es como una cobija corta: si te cubres la cabeza, te destapas los pies”. Eso es justamente lo que le está pasado a Millonarios en la Liga Águila.

El semestre pasado, el equipo que dirige Jorge Luis Pinto fue muy sólido en defensa, confiable en la parte de atrás, pero careció de contundencia, de un goleador que lo sacara de apuros. Ahora, en el arranque del torneo, parece haber encontrado la solución a la falta de gol con el delantero costarricense José Guillermo Ortiz, quien en tres presentaciones ha conseguido cinco anotaciones. Le marcó dos al Medellín, el miércoles, en la vuelta de los octavos de final de la Copa Águila, y tres a Equidad, el sábado, por la sexta jornada de la Liga.

Ortiz, que debutó jugando algunos minutos frente al Huila, el fin de semana pasado, es un atacante luchador, de mucha dinámica y entrega. No se ve muy técnico, pero maneja ambos perfiles. Y aunque tampoco es alto, ni potente, se las arregla para complicar a los defensas e incomodarlos.

Es práctico a la hora de definir. Lo ha demostrado con sus tantos. Tres con pierna derecha, dos de ellos de puntazo, y dos más de golpe de cabeza.

El problema para el conjunto albiazul ahora es que perdió la solidez en la zaga y cada vez que lo atacan le generan peligro. La salida del uruguayo Matías de los Santos se ha sentido más de lo esperado. Se extraña su voz de mando y orden, así fuera un jugador un poco lento, como lo era también Andrés Cadavid. Sin ellos, la defensa se quedó sin un referente, pues los más experimentados de esa zona, Jaír Palacios y Felipe Banguero, no tienen el carácter para liderar.

Álex Rambal, Breinner Paz, Deivy Balanta, Stiven Vega y Andrés Román son futbolistas en formación a los que les faltan muchos kilómetros por recorrer. La esperanza del cuerpo técnico es el regreso de Luis Payares, quien ya entrena con el equipo tras superar una trombosis cerebral a consecuencia de un golpe en una práctica, a comienzos de mayo.

Los errores defensivos son el dolor de cabeza del cuerpo técnico embajador tras las primeras seis fecha de la Liga, en las que el cuadro azul ha ganado cuatro partidos, empatado uno y perdido otro, con diez goles a favor y siete en contra.

“No hay felicidad completa, estamos sacando buenos resultados, pero tenemos que corregir los errores de la parte de atrás para potenciar lo que se está haciendo en ataque”, admitió el estratega santandereano tras la sufrida victoria sobre Equidad, para quien “la clave en este deporte está en el equilibrio”.

Pinto reconoció que “me mortifican goles como los que estamos encajando, en pelotas cruzadas, en pérdidas en salida o balones aéreos con los rivales mal referenciados. De todas maneras confío en este plantel y sé que iremos entendiendo la idea con trabajo y repetición”.

Para el entrenador del club albiazul, líder de la reclasificación del año, con 63 puntos, “nos falta madurez, personalidad para manejar los partidos. Hay algunos conceptos tácticos que todavía no hemos podido mecanizar”.

Millonarios no jugará a mitad de semana, cuando se dispute la séptima fecha del torneo, pues su visita al Unión Magdalena se aplazó para el 4 de septiembre. Su próxima presentación en la Liga será el sábado, cuando reciba en El Campín al Deportivo Cali.

“Nosotros ahora mismo estamos enfocados en sumar la mayor cantidad de puntos para asegurar la clasificación a las finales y, si se puede, un cupo a torneo internacional para el año entrante. Claro, en lo futbolístico hay que tratar de jugar mejor y si se puede más bonito”, agregó Pinto, quien espera, además del regreso de Payares, el de el volante creativo Santiago Montoya y el delantero Juan Camilo Salazar, ambos con problemas musculares.