El 30 de abril de 1949 arrancó el segundo campeonato profesional del fútbol colombiano. En esta ocasión participaron 14 equipos, con debutantes tales como: Cali, Boca Juniors de la misma ciudad, Huracán de Medellín o Deportivo Barranquilla. Justamente este último equipo se enfrentó a Millonarios ese día con marcador final de empate a dos goles. El vigente campeón, Independiente Santa Fe, se impuso sobre el Medellín por 3-1.
En momentos en que se iniciaba este segundo campeonato, también se disputó la Copa América en Brasil, dejando como campeón al anfitrión. Colombia acudió a ese torneo con un equipo de la Costa Atlántica, pues estaba intacta la pelea entre la Adefútbol y la Dimayor. El conjunto dirigido por Roberto ‘El Flaco’ Meléndez apenas logró dos puntos por sendos empates con Chile y Uruguay. Terminó goleado por Paraguay, Perú, Brasil, Ecuador y Bolivia. Argentina no participó.
Hasta finales de mayo, el líder del torneo era el Deportivo Cali que conformó un equipo llamado el ‘Rodillo Negro’, que integró a estelares jugadores peruanos. Valeriano López, Guillermo Barbadillo o Máximo ‘Vides’ Mosquera. Sin embargo, el 30 de mayo, los directivos de Millonarios sorprendieron con el anuncio de que llegaba para el club el jugador argentino Adolfo Pedernera, exseleccionado su país y figura de River Plate de Buenos Aires.
Su debut se dio el 26 de junio en un partido conta el Deportes Caldas. Ante 30 mil personas, con arbitraje del juez italiano Diego de Leo, fue tan importante el encuentro que el saque de honor lo hicieron conjuntamente el alcalde de Bogotá, Gregorio Obregón, y el embajador de Argentina. El primer tiempo terminó sin goles, pero en el minuto cuatro de la segunda etapa, un cobro de tiro libre de Pedernera permitió que, de cabeza, Pedro Cabillón rompiera la paridad.
El comentario de los aficionados sintetizó lo que significó Pedernera en ese primer juego: “No corre mucho, pero piensa demasiado”. Ese día, el astro argentino se lució con dos pases goles más para que celebraran Gabino Granados y Alfredo Mosquera. En adelante, se convirtió en la sensación. Pero la expectativa mayor llegó el 4 de junio, con el clásico bogotano, que terminó empatado a dos. Dos dianas de Germán Antón, por los cardenales, y goles de Pedernera y Alfredo Castillo por los albiazules.
Desde ese momento en adelante, la pelea por el título se centró en los dos equipos bogotanos y el Cali. Hasta que se dio el encuentro esperado por la afición el 31 de julio se enfrentaron el conjunto vallecaucano y Millonarios en el estadio Pascual Guerrero. El goleador Castillo abrió el marcador a los 12 minutos, pero el alero derecho del cuadro azucarero, ‘Leticiano’ Guzmán, empató a los 20. Posteriormente, se fueron arriba con gol de Severiano Ramos, y el conjunto azul volvió a empatar Pedro Cabillón.
Para la segunda etapa Manuel Giudice tenía anulado al estelar Pedernera y la cancha, como reseñaron los cronistas, parecía un jabón. Al minuto 10 del segundo tiempo, nuevamente el cuadro bogotano tomó ventaja con gol de Pedro Cabillón, pero al final empató el juego Barbadillo. El equipo vallecaucano conservó el liderato, pero los clubes capitalinos quedaron a dos puntos. Entonces, en la primera semana de agosto, Millonarios volvió a sorprender por sus anuncios.
Se incorporaron al club los argentinos Alfredo Di Stefano y Néstor Raúl Rossi, justo para iniciar la segunda vuelta del torneo. Por eso, el primer equipo en sufrir la tromba en que se convirtió el ‘Ballet Azul’ fue el Deportivo Barranquilla, que salió goleado 5-0. Bajo un torrencial aguacero bogotano, Di Stefano ese día hizo dos y Pedro Cabillón tres. Pero Cali no aflojó la punta y ese mismo día goleó al Bucaramanga por marcador de 6-1.
Aunquel conjunto albiazul empezó a hacerle de a cinco goles a cada uno de sus rivales, los vallecaucanos respondieron de la misma manera, goleando a los suyos. A pesar de que la situación política del país era crítica y en la primera semana de septiembre fue tan grave que resultó muerto a bala en el Congreso en un debate el representante a la Cámara Gustavo Jiménez, el fútbol ya era una pasión alterna que permitía a los colombianos alejarse de la contienda política al rojo vivo.
Era tal el entusiasmo por el fútbol que hacia el mes de octubre se hizo una encuesta nacional para que los colombianos escogieran el deportista más popular del país, el ganador fue Julio ‘Chonto’ Gaviria, el arquero de Santa Fe. Y el segundo en votos fue Pedro Cabillón de los albiazules. Esa elección terminó siendo la antesala del partido de la discordia, del cual se habló mucho tiempo en el país, pero el olvido terminó por imponerse ocultando los hechos.
El 9 de octubre en El Campín, jugaron Millonarios y América. Sorpresivamente, en una cancha llena de pantano, y con la figura de la cancha el arquero escarlata, Efraín ‘El Caimán’ Sánchez, el equipo caleño derrotó a bogotano por 2-1. Sin embargo, cuando faltaban tres minutos para terminar el juego, el presidente del equipo embajador Alfonso Senior y el entonces vicepresidente de la Dimayor, Daniel Hoyos, anunciaron que el partido no era válido.
Los dos dirigentes manifestaron que América había jugado por respeto al público pero que los puntos eran para los azules. La razón: el equipo escarlata alineó a dos jugadores que estaban sancionados, y como el árbitro de la contienda se negaba a pitar el encuentro, se decidió que se jugara para no perder la taquilla, pero los puntos eran para Millos. De esa manera, el equipo albiazul se mantuvo cerca del Deportivo Cali que seguía en la punta.
A la siguiente fecha, el cuadro capitalino le ganó el clásico a Santa Fe 6-3 con dos goles de Di Stefano y uno de Pedernera y tomó la punta del torneo porque sorpresivamente los verdes perdieron con Medellín por 3-2. Al cierre de octubre, Millonarios y Cali estaban empatados con 42 puntos. Santa Fe tenía 38. Al cierre del torneo se mantuvo el empate a 44 unidades, lo que determinó una serie extra entre los dos conjuntos para definir el título de 1949.
El campeonato se resolvió en dos juegos. Primero en Cali, con gol de penal de Pedernera, los azules tomaron ventaja, y en la primera semana de diciembre, el equipo bogotano derrotó 3-2 a los vallecaucanos y alcanzó su primera estrella. Además de los argentinos, brillaron en el equipo azul los colombianos Francisco ‘Cobo’ Zuluaga y Gabriel Ochoa Uribe. Con ellos el peruano Ismael Soria, el uruguayo Alcides Aguilera y el brasilero Danilo Mourman, entre otros.
El año concluyó con más noticias de fútbol porque el 9 de noviembre, el gobierno de Mariano Ospina Pérez impuso el Estado de Sitio, cerró el Congreso y formalizó la censura de prensa. En el último juego del torneo, Néstor Raúl Rossi y Valeriano López protagonizaron una pelea que obligó a la intervención de la fuerza pública. Ese año de 1949, se inició la época de ‘El Dorado’, que le permitió a Colombia tener a grandes luminarias del continente en sus equipos.