Las horas contadas de Ricardo Lunari

El gol de Óscar Barreto, al minuto 92, no sólo le quitó a Millonarios la posibilidad de sumar un punto frente a La Equidad en la octava fecha de la Liga Águila, sino que casi que sentenció el futuro del técnico argentino Ricardo Lunari, a quien su cara de preocupación tras la caída y sus posteriores palabras en la rueda de prensa, delataron su máxima alerta.

Pero lo cierto es que antes de la derrota con La Equidad, el camino del argentino, de 45 años de edad, ya estaba bastante espinoso por el mal comienzo de temporada. Sin embargo, este nuevo revés, el que Ricardo Lunari quiso evitar con unas acertadas variantes en el segundo tiempo, sí ahondó la crisis de un equipo que marcha en la parte baja de la tabla, con apenas siete puntos (una victoria, cuatro empates y dos derrotas), cada vez más lejos de pensar en una clasificación.

Según conoció El Espectador los directivos del equipo albiazul desde hace tres semanas iniciaron contactos con tres técnicos extranjeros, las gestiones están bastante avanzadas y ya están en el remate de revisar los contratos porque las condiciones que exigen son diferentes a las que tienen pactadas con Lunari, quien llegó a Millonarios a mitad de temporada del segundo semestre del año pasado, irónicamente a apagar el fuego que se vivía por esos días con el estratega español Juan Manuel Lillo.

En medio del mea culpa de la crisis deportiva del equipo embajador, los directivos son conscientes de que el problema de resultados no es sólo culpa del entrenador sino también de los jugadores y por eso además trabajan intensamente en conseguir refuerzos. Al respecto ya se iniciaron contactos, porque además de la salida del goleador Fernando Uribe y el defensa panameño Román Torres, en el pasado mercado, hay varios de los que actúan en el equipo en la actualidad a los que se les vence el contrato al finalizar el año.

Lo cierto es que los directivos son conscientes de la falta de refuerzos para este semestre y por eso hay una gestión de fondo para hacer renovación del equipo. En todo caso, los refuerzos ya serían para la temporada 2016, ya que el libro de inscripciones para jugadores sin contrato (libres) se cerró el pasado viernes.

Se habló en un comienzo de que el técnico argentino Gustavo Costas, el mismo que llevó a Independiente Santa Fe al campeonato, podría ser uno de los integrantes del trío que maneja la junta directiva de Millonarios, pero esa versión ya fue desmentida.

A favor del técnico Lunari está justamente lo ratificado por los propios directivos del cuadro embajador y es la falta de refuerzos. Para este semestre apenas llegaron al equipo Michael Rangel, Sergio Romero, Hárrison Otálvaro y Ramiro Sánchez, ninguno de gran nivel para los objetivos del club.

El mismo Ricardo Lunari, en la rueda de prensa, posterior a la derrota con La Equidad, mostró su descontento con el trabajo de sus jugadores: “Me parece inexplicable, inaudito, que nos hagan los dos mismos goles que nos hicieron en Tuluá. Lo hablamos, lo trabajamos hasta el cansancio, pero a veces se terminan las palabras, estoy muy dolido y se hace difícil de explicar lo inexplicable, no podemos perder con errores tan groseros nuestros. Hicimos un esfuerzo increíble para empatar un partido complicado frente a un gran rival, difícil, duro, que juega y que mete”.

Pero dejó la puerta abierta para el cambio, que parece que tomará otro rumbo, sin embargo: “Tenemos que salir adelante y jugar con optimismo; durante la semana trabajamos mucho y los resultados siguen sin aparecer. Eso nos tiene muy preocupados, necesitamos respuestas, respuestas urgentes y en la cancha”.

Lo cierto es que el miércoles se reunirán los directivos de Millos para tomar decisiones. Las horas para Lunari están contadas y su reemplazo es por ahora el único dolor de cabeza de los responsables del club, los mismos que a mitad de año lo renovaron.

El gol de Óscar Barreto, al minuto 92, no sólo le quitó a Millonarios la posibilidad de sumar un punto frente a La Equidad en la octava fecha de la Liga Águila, sino que casi que sentenció el futuro del técnico argentino Ricardo Lunari, a quien su cara de preocupación tras la caída y sus posteriores palabras en la rueda de prensa, delataron su máxima alerta.

Pero lo cierto es que antes de la derrota con La Equidad, el camino del argentino, de 45 años de edad, ya estaba bastante espinoso por el mal comienzo de temporada. Sin embargo, este nuevo revés, el que Ricardo Lunari quiso evitar con unas acertadas variantes en el segundo tiempo, sí ahondó la crisis de un equipo que marcha en la parte baja de la tabla, con apenas siete puntos (una victoria, cuatro empates y dos derrotas), cada vez más lejos de pensar en una clasificación.

Según conoció El Espectador los directivos del equipo albiazul desde hace tres semanas iniciaron contactos con tres técnicos extranjeros, las gestiones están bastante avanzadas y ya están en el remate de revisar los contratos porque las condiciones que exigen son diferentes a las que tienen pactadas con Lunari, quien llegó a Millonarios a mitad de temporada del segundo semestre del año pasado, irónicamente a apagar el fuego que se vivía por esos días con el estratega español Juan Manuel Lillo.

En medio del mea culpa de la crisis deportiva del equipo embajador, los directivos son conscientes de que el problema de resultados no es sólo culpa del entrenador sino también de los jugadores y por eso además trabajan intensamente en conseguir refuerzos. Al respecto ya se iniciaron contactos, porque además de la salida del goleador Fernando Uribe y el defensa panameño Román Torres, en el pasado mercado, hay varios de los que actúan en el equipo en la actualidad a los que se les vence el contrato al finalizar el año.

Lo cierto es que los directivos son conscientes de la falta de refuerzos para este semestre y por eso hay una gestión de fondo para hacer renovación del equipo. En todo caso, los refuerzos ya serían para la temporada 2016, ya que el libro de inscripciones para jugadores sin contrato (libres) se cerró el pasado viernes.

Se habló en un comienzo de que el técnico argentino Gustavo Costas, el mismo que llevó a Independiente Santa Fe al campeonato, podría ser uno de los integrantes del trío que maneja la junta directiva de Millonarios, pero esa versión ya fue desmentida.

A favor del técnico Lunari está justamente lo ratificado por los propios directivos del cuadro embajador y es la falta de refuerzos. Para este semestre apenas llegaron al equipo Michael Rangel, Sergio Romero, Hárrison Otálvaro y Ramiro Sánchez, ninguno de gran nivel para los objetivos del club.

El mismo Ricardo Lunari, en la rueda de prensa, posterior a la derrota con La Equidad, mostró su descontento con el trabajo de sus jugadores: “Me parece inexplicable, inaudito, que nos hagan los dos mismos goles que nos hicieron en Tuluá. Lo hablamos, lo trabajamos hasta el cansancio, pero a veces se terminan las palabras, estoy muy dolido y se hace difícil de explicar lo inexplicable, no podemos perder con errores tan groseros nuestros. Hicimos un esfuerzo increíble para empatar un partido complicado frente a un gran rival, difícil, duro, que juega y que mete”.

Pero dejó la puerta abierta para el cambio, que parece que tomará otro rumbo, sin embargo: “Tenemos que salir adelante y jugar con optimismo; durante la semana trabajamos mucho y los resultados siguen sin aparecer. Eso nos tiene muy preocupados, necesitamos respuestas, respuestas urgentes y en la cancha”.

Lo cierto es que el miércoles se reunirán los directivos de Millos para tomar decisiones. Las horas para Lunari están contadas y su reemplazo es por ahora el único dolor de cabeza de los responsables del club, los mismos que a mitad de año lo renovaron.