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Equidad Seguros llegó al estadio El Campín con la intención de seguir en carrera hacia las semifinales, pero al frente se encontró con un Millonarios más que motivado, luego de conocer que no sería liquidado y que tenía aprobado un plan de salvamento.
Si bien es cierto que en el primer tiempo Millonarios mostró la acostumbrada faceta de 2010, es decir, un equipo errático, impreciso, con más corazón que fútbol, en el complementó sacó credenciales de recuperación.
Leonardo Castro y Sherman Cárdenas reaparecieron en El Campín, pero para hacer frente a su antiguo equipo, y quizás ese afán de 'revancha' los llevó a jugar un partido aparte, de poco brillo y de más imprecisión que de aciertos, algo extraño en ellos por lo mostrado en anteriores duelos, y por ende terminaron sustituidos.
En el primer tiempo, John Viáfara fue el referente asegurador que, desde la defensa, empujó al equipo contra esa ‘muralla azul' que quiso montar el técnico Nilton Bernal, pues la doble línea de cuatro, en condición de local, es poco habitual en un equipo como Millonarios.
La vulneración llegó al minuto 31 cuando, tras cobro de tiro de esquina, Carlos Rentería capitalizó un balón que quedó suelto, producto de varios remates y rechazos imprecisos.
Desde entonces, Millonarios mejoró en la intención ofensiva, mas no en los aciertos, hecho que favoreció a Equidad, que apostó a rápidos contragolpes, malogrados para la molestia del técnico García.
Pese a ser despedidos en medio de abucheos y el sonoro "movete Millos..movete", los jugadores de Millonarios fueron recibidos con aplausos para el comienzo de una segunda parte inolvidable para los azules.
El aviso de la recuperación de Millonarios se dio con el aviso del remate de Omar Andrés Rodríguez (m. 66), que salvó milagrosamente Nelson Ramos.
A Equidad se le acabó el oxigeno y Millonarios sí que aprovechó dicha situación. Yovanny Arrechea, al minuto 75, convirtió el tanto de la igualdad desde el punto penalti y le puso fin a la embalada que tenía Equidad en la últimas jornadas de la Liga.