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“Es inaudito que un equipo que disputa la fase semifinal de la Copa Libertadores tenga desprotegido su mayor activo, los futbolistas”, indicó.
Cúcuta Deportivo, sorpresivo semifinalista en la pasada Copa Libertadores y clasificado para el torneo continental de este año, perdió a varias de sus principales figuras.
El zaguero Walter Moreno, miembro de la selección colombiana, pasó al campeón Atlético Nacional y ocupó el lugar del ecuatoriano Agustín Delgado, mientras que los volantes Dúmar Rueda y Alex del Castillo terminaron en el Atlético Junior y el uruguayo Roberto Bobadilla en el Deportivo Táchira de Venezuela.
El técnico Jorge Luis Bernal no contará con 11 de los hombres que tuvo en la pasada temporada y ahora trata de acomodar las cargas con seis jugadores, entre ellos el argentino Matías Urbano, pero solicitó otros siete jugadores para encarar el torneo Apertura colombiano y la fase inicial de la Copa Libertadores.
Los modestos recursos del conjunto “Motilón” no le permiten contratar futbolistas de categoría y los hinchas no se hacen muchas ilusiones.
Cúcuta quedó en un grupo complicado al lado del Santos de Brasil, San José de Bolivia y Chivas de México. El onceno de Bernal dispuso de buenos recursos económicos hasta que Ramiro Suárez Corzo fue el alcalde de Cúcuta, en la frontera con Venezuela, pero cuando paró en la cárcel acusado de presuntos vínculos con los paramilitares, la situación cambió a tal punto que, según la denuncia, dejó de pagar la seguridad social y pensiones del plantel.