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Este domingo viajó con el plantel a EE.UU. para jugar dos amistosos.
Desde sus inicios en el Itagüí, John Valencia marcó la diferencia por la precisión y elegancia de su juego como volante de creación, hecho que lo hizo fichar por el DIM, el equipo de sus afectos desde su infancia y con el que salió campeón de la Primera C de la mano del técnico Víctor Luna.
Pero fue precisamente él quien no lo tuvo en cuenta en la lista de jugadores que ascenderían al primer equipo y salió por la puerta de atrás porque afirma, además, que lo trataron muy mal.
Decepcionado de su equipo y de paso del fútbol, en 2004 llegó al Deportes Quindío, dirigido por Diego Édison Umaña, quien marcó un antes y un después en su carrera deportiva. Le dio la oportunidad de debutar y de paso lo convirtió en volante de marca. A él le debe que hoy sea uno de los mejores del país en su posición.
No por casualidad es importante en la línea titular del técnico Juan Carlos Osorio, en el Once Caldas, y de Hernán Bolillo Gómez en la selección de Colombia. Feliz por su tercera convocatoria, ayer viajó a Estados Unidos con el plantel que enfrentará partidos amistosos ante Ecuador y la selección estadounidense, los próximos 8 y 12 de octubre, respectivamente.
¿Cómo fueron sus inicios en el fútbol colombiano?
Desde muy niño mis papás me decían que iba detrás de una pelota. Nací con balones a mi alrededor. Era lo mejor para mí, desde que estaba en la escuelita de fútbol en Medellín.
¿Siempre fue volante de recuperación?
Empecé como volante de creación. Pero desde que trabajé con el ‘profe’ Umaña, él decidió convertirme en volante de recuperación, un poco más retrasado, porque, según él ahí tenía más visión.
Para ser volante de marca, usted es lento y poco agresivo...
Me ha costado. Pero en los equipos que he estado siempre he encontrado una pareja. Yo soy el que salgo jugando y el que está a mi lado el que recupera. En el Quindío estuve con Diego Chará, en el América con Jaime Córdoba, y en Once, con Diego Arias.
¿Es hincha de qué equipo?
Curiosamente me gustaba Medellín desde pequeño. Pero el Quindío fue el que me dio la oportunidad y allí crecí como jugador. Por eso lo sigo mucho.
¿Qué siente cuando le marca al DIM?
Es lindo anotar ante equipos grandes, pero más ante el Medellín. Pudieron tenerme ahí y lo que hicieron fue tratarme muy mal. Por eso se me pasa un ‘fresquito’ cada vez que le marco un gol.
¿Qué estudios ha realizado?
No pude terminar el bachillerato por cosas personales que no quisiera mencionar. Todavía tengo tiempo para terminarlo. Me gustaría estudiar para ser técnico y seguir vinculado al fútbol.
¿Está casado?
Sí. Vivo con mi esposa, Tatiana Cruz, y con mi hija de 16 meses, Salomé. Ellas son mi inspiración y por las que me esfuerzo al máximo a diario, para darles lo mejor.
¿Quiere que Salomé siga sus pasos?
Aunque admiro mucho a las mujeres futbolistas, no me gustaría que jugara. Mi esposa y yo decimos que es mejor que estudie.
¿Por qué usa siempre el número 14 en su dorsal?
Desde muy joven seguía mucho a Leonel Álvarez en el Nacional. Por eso es muy lindo trabajar con él en la selección. Le he aprendido mucho.
¿En qué equipo sueña con jugar?
En el Boca Juniors de Argentina. Desde chiquito me gustaba seguir a los colombianos que vestían esa camiseta. Óscar Córdoba, El Chicho Serna y Jorge Bermúdez.
¿Ha recibido ofertas de la institución ‘xeneize’?
No, nunca. Pero sí, tuve conversaciones con dirigentes de River Plate (risas). También sería lindo porque es un equipo grande y con mucha historia.
¿Cuál ha sido su mejor logro?
Quedar campeón con América en 2008. Es un club que quiero mucho. Ojalá pueda regresar.
¿Cómo ve el presente del Once Caldas?
Satisfactorio. Empezamos mal, pero hemos conseguido victorias importantes. Vamos por el camino correcto para ser campeones.
Por nómina están obligados a ganar el título...
Siempre vas a tener presión. Tenemos un gran equipo y por eso siempre estaremos presionados. Ahora estamos sumando más.
Están consiguiendo resultados, pero la hinchada no los acompaña...
La gente acá es muy incrédula, no creen en nosotros. En cada partido uno espera público porque hay buen equipo y ya estamos ganando, pero no nos acompañan. Es muy triste esa situación.
¿A qué atribuye su regularidad en los llamados por ‘Bolillo’ en la selección?
Cuando fui convocado a los partidos en Sudáfrica e Inglaterra, él quedó con una buena impresión de mi rendimiento. También en el Once he realizado buenas campañas. El camino es largo y seré tomado en cuenta para algunas convocatorias y para otras no, por eso tengo que esforzarme mucho.
¿Cuál es el motivo de que todos los volantes de recuperación de la selección militen en el rentado?
En Colombia tenemos grandes jugadores en esa posición. El cuerpo técnico conoce muy de cerca el trabajo de nosotros.
¿Qué piensa sobre ‘Bolillo’?
Sabe mucho de fútbol, sus conceptos son muy claros respecto a la función de cada jugador. Además él ha ido a Mundiales y la experiencia que tiene es muy amplia. Muy bueno que él esté como técnico.
¿Cree en la clasificación al próximo Mundial de Brasil 2014?
Indudablemente. Tenemos una gran selección. Hay muy buenos jugadores y el cuerpo técnico es excelente. Estoy muy seguro de que en Brasil estaremos.
¿Confía en que usted forme parte de ese proceso?
Sí. A medida que han pasado las convocatorias he sido llamado en su gran mayoría y eso me motiva mucho.