Así cambió el orden del fútbol colombiano en la última década
Atlético Nacional pasó a ser el más ganador de todos, América descendió, pero regresó a la primera categoría para ser bicampeón, y Santa Fe y Millonarios rompieron con las malas rachas que cargaban a cuestas.
Esta década que termina en el fútbol colombiano fue importante para los clubes grandes del país, para unos que rompieron rachas negativas, para otros que hicieron del verbo ganar algo más habitual, incluso para algunos que repitieron lo que no parecía repetible.
El camino en este decenio inició con el título de Nacional en el primer semestre de 2011 (superó a Equidad en la final) y terminó con el festejo de América hace unos días en el estadio El Campín por su estrella 15. En ese período, en el que se disputaron 19 torneos cortos, Atlético Nacional fue el más vencedor.
El club verde, que comenzó con 10 estrellas, terminará con 16, eso sí, sin festejar hace tres años (en 2017 fue la última vez que fue campeón tras derrotar a Deportivo Cali) y siendo la institución más laureada de todas.
Ahí enseguida hay que hablar del club Tiburón y sus tres festejos en estos 10 años, del equipo que con una clara ambición se reforzó para ganar todo lo que jugó y que luego de este período alcanzó los nueve títulos sabiendo que en 2011 tenía seis.
Tampoco se pueden olvidar las gestas -hay que llamarlas así- de Santa Fe y Millonarios, que volvieron a festejar en Colombia. El cuadro cardenal cortó el tormento de 37 años sin ser el mejor, mientras que el conjunto embajador le puso un pare a una cuenta que ya iba por los 24. Ambos lo hicieron en 2012 y ambos lo volverían a hacer: Santa Fe en 2014-II y en 2016-II, y Millonarios en el segundo semestre de 2017.
Por supuesto, lo más destacable, o heroico, fue lo que sucedió con América. La derrota con Patriotas, por penaltis, el 17 de diciembre de 2011 en el estadio Pascual Guerrero, los cinco años en la segunda división y las frustraciones de estar siempre cerca, el 27 de noviembre de 2016, la victoria sobre Deportes Quindío y el final de lo que en Cali mismo denominaron como un infierno.
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Y además de eso, tres años después, llegó la estrella 14 luego de superar a Júnior en la final (2019-II), la 15 hace unos días tras vencer a Santa Fe y de nuevo el conjunto escarlata en lo más alto de todo.
Claro que también hay otras historias destacadas, aunque solo sean grandilocuentes para cada quien, como la novena estrella de Deportivo Cali (venció al DIM en 2015-II), la sexta de Independiente Medellín (derrotó a Júnior en 2016-I) y la segunda de Deportes Tolima (venció a Nacional en 2018-I).
En esta década también hay que rescatar que Colombia sumó dos títulos internacionales gracias a la Copa Suramericana de Santa Fe en 2015, tras dejar en el camino a Huracán de Argentina, y a la Copa Libertadores de Nacional en 2016, luego de derrotar a Independiente del Valle de Ecuador para completar dos trofeos en este torneo (el otro fue en 1989).
En este 2020, que cierra un decenio de muchos cambios y de muchas dificultades, Nacional se consagró como el más ganador de todos en un país como Colombia, en el que puede jugarse el fútbol bajo cualquier circunstancia.
La deuda de 2020
En el último año de esta década las participaciones de los clubes colombianos en torneos internacionales fueron muy pobres. En la Copa Libertadores, por ejemplo, Independiente Medellín y Deportes Tolima disputaron las fases previas del evento. El primero avanzó a la fase de grupos al superar a Atlético Tucumán, mientras que el segundo perdió con Inter de Porto Alegre, y tuvo que resignarse a jugar la Suramericana.
En el Grupo A, Júnior fue tercero, muy lejos de Flamengo de Brasil e Independiente del Valle, primero y segundo, respectivamente, y también obtuvo tiquete directo a la Suramericana. En el E, América, que regresó a un campeonato continental luego de 11 años, no pudo con sus rivales (Gremio, Inter y Universidad Católica), sumó apenas seis unidades (solo un partido ganado) y se despidió de manera prematura. Claro, el cuadro escarlata venía de un cambio de entrenador y varios de los jugadores que fueron la columna del título de 2019 se marcharon.
Lea aquí: Dimayor eligió su XI ideal de la temporada
Entretanto, en la Suramericana, Júnior fue el club que más lejos llegó (perdió en cuartos de final con Coquimbo). Deportivo Cali se quedó en octavos contra Vélez Sarsfield; Millonarios en la segunda fase ante el club azucarero, Nacional fue derrotado por River Plate de Uruguay y Tolima dijo adiós frente a Unión La Calera.
De hecho, para encontrar una buena actuación de un club colombiano en la Libertadores hay que ir atrás, hasta 2016, con Nacional siendo el campeón en Medellín. En la Sudamericana solo es necesario retroceder dos años, cuando Júnior fue finalista frente a Atlético Paranaense y se le escapó el título desde los cobros de punto penal.
El tiempo dará otra oportunidad y llegará una nueva temporada para que quienes vayan a competencias internacionales (América, Santa Fe, Júnior y Nacional en la Libertadores, y Pasto, Tolima y Cali a la Suramericana) compensen lo malo del pasado y trabajen para superar las expectativas o, mejor, para hacer que nazcan de nuevo.
Esta década que termina en el fútbol colombiano fue importante para los clubes grandes del país, para unos que rompieron rachas negativas, para otros que hicieron del verbo ganar algo más habitual, incluso para algunos que repitieron lo que no parecía repetible.
El camino en este decenio inició con el título de Nacional en el primer semestre de 2011 (superó a Equidad en la final) y terminó con el festejo de América hace unos días en el estadio El Campín por su estrella 15. En ese período, en el que se disputaron 19 torneos cortos, Atlético Nacional fue el más vencedor.
El club verde, que comenzó con 10 estrellas, terminará con 16, eso sí, sin festejar hace tres años (en 2017 fue la última vez que fue campeón tras derrotar a Deportivo Cali) y siendo la institución más laureada de todas.
Ahí enseguida hay que hablar del club Tiburón y sus tres festejos en estos 10 años, del equipo que con una clara ambición se reforzó para ganar todo lo que jugó y que luego de este período alcanzó los nueve títulos sabiendo que en 2011 tenía seis.
Tampoco se pueden olvidar las gestas -hay que llamarlas así- de Santa Fe y Millonarios, que volvieron a festejar en Colombia. El cuadro cardenal cortó el tormento de 37 años sin ser el mejor, mientras que el conjunto embajador le puso un pare a una cuenta que ya iba por los 24. Ambos lo hicieron en 2012 y ambos lo volverían a hacer: Santa Fe en 2014-II y en 2016-II, y Millonarios en el segundo semestre de 2017.
Por supuesto, lo más destacable, o heroico, fue lo que sucedió con América. La derrota con Patriotas, por penaltis, el 17 de diciembre de 2011 en el estadio Pascual Guerrero, los cinco años en la segunda división y las frustraciones de estar siempre cerca, el 27 de noviembre de 2016, la victoria sobre Deportes Quindío y el final de lo que en Cali mismo denominaron como un infierno.
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Y además de eso, tres años después, llegó la estrella 14 luego de superar a Júnior en la final (2019-II), la 15 hace unos días tras vencer a Santa Fe y de nuevo el conjunto escarlata en lo más alto de todo.
Claro que también hay otras historias destacadas, aunque solo sean grandilocuentes para cada quien, como la novena estrella de Deportivo Cali (venció al DIM en 2015-II), la sexta de Independiente Medellín (derrotó a Júnior en 2016-I) y la segunda de Deportes Tolima (venció a Nacional en 2018-I).
En esta década también hay que rescatar que Colombia sumó dos títulos internacionales gracias a la Copa Suramericana de Santa Fe en 2015, tras dejar en el camino a Huracán de Argentina, y a la Copa Libertadores de Nacional en 2016, luego de derrotar a Independiente del Valle de Ecuador para completar dos trofeos en este torneo (el otro fue en 1989).
En este 2020, que cierra un decenio de muchos cambios y de muchas dificultades, Nacional se consagró como el más ganador de todos en un país como Colombia, en el que puede jugarse el fútbol bajo cualquier circunstancia.
La deuda de 2020
En el último año de esta década las participaciones de los clubes colombianos en torneos internacionales fueron muy pobres. En la Copa Libertadores, por ejemplo, Independiente Medellín y Deportes Tolima disputaron las fases previas del evento. El primero avanzó a la fase de grupos al superar a Atlético Tucumán, mientras que el segundo perdió con Inter de Porto Alegre, y tuvo que resignarse a jugar la Suramericana.
En el Grupo A, Júnior fue tercero, muy lejos de Flamengo de Brasil e Independiente del Valle, primero y segundo, respectivamente, y también obtuvo tiquete directo a la Suramericana. En el E, América, que regresó a un campeonato continental luego de 11 años, no pudo con sus rivales (Gremio, Inter y Universidad Católica), sumó apenas seis unidades (solo un partido ganado) y se despidió de manera prematura. Claro, el cuadro escarlata venía de un cambio de entrenador y varios de los jugadores que fueron la columna del título de 2019 se marcharon.
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Entretanto, en la Suramericana, Júnior fue el club que más lejos llegó (perdió en cuartos de final con Coquimbo). Deportivo Cali se quedó en octavos contra Vélez Sarsfield; Millonarios en la segunda fase ante el club azucarero, Nacional fue derrotado por River Plate de Uruguay y Tolima dijo adiós frente a Unión La Calera.
De hecho, para encontrar una buena actuación de un club colombiano en la Libertadores hay que ir atrás, hasta 2016, con Nacional siendo el campeón en Medellín. En la Sudamericana solo es necesario retroceder dos años, cuando Júnior fue finalista frente a Atlético Paranaense y se le escapó el título desde los cobros de punto penal.
El tiempo dará otra oportunidad y llegará una nueva temporada para que quienes vayan a competencias internacionales (América, Santa Fe, Júnior y Nacional en la Libertadores, y Pasto, Tolima y Cali a la Suramericana) compensen lo malo del pasado y trabajen para superar las expectativas o, mejor, para hacer que nazcan de nuevo.