La jerarquía es del verde

Jerarquía fue lo que le pidió el presidente César Pastrana a sus jugadores luego de que perdieron 2-1 frente al Once Caldas en los cuartos de final de la Liga Postobón. No estaba conforme con la actitud que habían mostrado sus “hijos”, como él los llama, y por eso les hizo un llamado de atención, que surtiría efecto porque en el partido de ida de la semifinal frente a Atlético Nacional, los jugadores cambiaron. Corrieron desde el comienzo y sobre una cancha inundada vencieron a los paisas. Esas palabras parecieron olvidarlas para el partido de vuelta que se jugó anoche en el estadio Atanasio Girardot de Medellín. En los primeros 10 minutos dominó el balón e incluso pudo irse arriba en el marcador gracias a Jonathan Copete, pero el campeón reaccionó y ganó 2-0.

La ventaja era corta (1-0), pero era ventaja y parecía suficiente si se tenía en cuenta que el cuadro cardenal es un buen visitante; además que llegaba con una estadística que le daba respaldo (un partido perdido de seis disputados en Medellín). Pero una desconcentración causó que rápidamente Nacional empatara la serie. Fue al minuto 24 cuando Sherman Cárdenas habilitó a Juan David Valencia en el sector izquierdo y este le ganó la posición a Luis Carlos Arias y remató de primera hacia al primer palo, que en teoría debía cubrir el arquero Camilo Vargas, pero que no hizo lo adecuado y tan sólo pudo ir a recoger el balón al fondo de la red.

Con el gol en contra, Santa Fe intentó reaccionar y por medio de pelotas paradas, una de sus armas más fuertes, por poco logra empatar; sin embargo, no contó con suerte a la hora de definir y al descanso se tuvo que ir por debajo en el marcador del partido y con la igualdad (1-1) en la serie. Por su parte, Nacional, siempre concentrado, generó peligro por intermedio de Jéfferson Duque y Edwin Cardona.

En el segundo tiempo, Nacional siguió dominando el partido. Parecía que los penales eran lo que querían los jugadores cardenales porque hicieron muy poco por descontar.
Jéfferson Duque, quien cada vez que enfrenta a Santa Fe anota en instancias definitivas, fue el encargado de marcar el gol que le dio el cupo a los verdolagas a la final. Nuevamente por el costado derecho de Santa Fe, el que desbordó fue Juan David Valencia, que centró a ras de piso para Duque, quien anticipó a Francisco Meza y casi cayéndose punteó el balón para vencer a Camilo Vargas.

Cuando tenía que reaccionar Santa Fe, el técnico le dio ingreso a Jéfferson Cuero, con quien buscó desborde y velocidad en los contragolpes, pero a Cuero nuevamente se le fueron las luces y su temperamento fuerte e irresponsabilidad, le ocasionaron que el árbitro Imer Machado le mostrara la tarjeta roja. Él vallecaucano cometió una falta normal, pero protestó y el juez le mostró la amarilla. No tuvo problema en reprochar la decisión con insultos y gestos, lo que le causó la expulsión.

Con un hombre menos, los últimos minutos fueron de trámite. Santa Fe no volvió a llegar y Nacional, conforme con la clasificación, no se desesperó. De esta manera el equipo dirigido por Juan Carlos Osorio llegó a su tercera final consecutiva en el fútbol profesional colombiano, en donde últimamente parece no tener rival. Derrotó hace una año a Santa Fe en la final, en el semestre pasado al Deportivo Cali y ahora queda la incógnita: ¿Júnior será su próxima víctima?

En Santa Fe se fueron en blanco. El equipo se armó pensando en pelear por la Copa Libertadores y la Liga Postobón pero no se cumplió. Habrá que analizar cuántos de los 14 jugadores que llegaron como refuerzos deben continuar. Lo que se debe reconocer es que Wilson Gutiérrez ha puesto al cuadro cardenal en los primeros lugares del fútbol nacional, acostumbrado a pelear por títulos y a eso se le debería dar continuidad.
 

Jerarquía fue lo que le pidió el presidente César Pastrana a sus jugadores luego de que perdieron 2-1 frente al Once Caldas en los cuartos de final de la Liga Postobón. No estaba conforme con la actitud que habían mostrado sus “hijos”, como él los llama, y por eso les hizo un llamado de atención, que surtiría efecto porque en el partido de ida de la semifinal frente a Atlético Nacional, los jugadores cambiaron. Corrieron desde el comienzo y sobre una cancha inundada vencieron a los paisas. Esas palabras parecieron olvidarlas para el partido de vuelta que se jugó anoche en el estadio Atanasio Girardot de Medellín. En los primeros 10 minutos dominó el balón e incluso pudo irse arriba en el marcador gracias a Jonathan Copete, pero el campeón reaccionó y ganó 2-0.

La ventaja era corta (1-0), pero era ventaja y parecía suficiente si se tenía en cuenta que el cuadro cardenal es un buen visitante; además que llegaba con una estadística que le daba respaldo (un partido perdido de seis disputados en Medellín). Pero una desconcentración causó que rápidamente Nacional empatara la serie. Fue al minuto 24 cuando Sherman Cárdenas habilitó a Juan David Valencia en el sector izquierdo y este le ganó la posición a Luis Carlos Arias y remató de primera hacia al primer palo, que en teoría debía cubrir el arquero Camilo Vargas, pero que no hizo lo adecuado y tan sólo pudo ir a recoger el balón al fondo de la red.

Con el gol en contra, Santa Fe intentó reaccionar y por medio de pelotas paradas, una de sus armas más fuertes, por poco logra empatar; sin embargo, no contó con suerte a la hora de definir y al descanso se tuvo que ir por debajo en el marcador del partido y con la igualdad (1-1) en la serie. Por su parte, Nacional, siempre concentrado, generó peligro por intermedio de Jéfferson Duque y Edwin Cardona.

En el segundo tiempo, Nacional siguió dominando el partido. Parecía que los penales eran lo que querían los jugadores cardenales porque hicieron muy poco por descontar.
Jéfferson Duque, quien cada vez que enfrenta a Santa Fe anota en instancias definitivas, fue el encargado de marcar el gol que le dio el cupo a los verdolagas a la final. Nuevamente por el costado derecho de Santa Fe, el que desbordó fue Juan David Valencia, que centró a ras de piso para Duque, quien anticipó a Francisco Meza y casi cayéndose punteó el balón para vencer a Camilo Vargas.

Cuando tenía que reaccionar Santa Fe, el técnico le dio ingreso a Jéfferson Cuero, con quien buscó desborde y velocidad en los contragolpes, pero a Cuero nuevamente se le fueron las luces y su temperamento fuerte e irresponsabilidad, le ocasionaron que el árbitro Imer Machado le mostrara la tarjeta roja. Él vallecaucano cometió una falta normal, pero protestó y el juez le mostró la amarilla. No tuvo problema en reprochar la decisión con insultos y gestos, lo que le causó la expulsión.

Con un hombre menos, los últimos minutos fueron de trámite. Santa Fe no volvió a llegar y Nacional, conforme con la clasificación, no se desesperó. De esta manera el equipo dirigido por Juan Carlos Osorio llegó a su tercera final consecutiva en el fútbol profesional colombiano, en donde últimamente parece no tener rival. Derrotó hace una año a Santa Fe en la final, en el semestre pasado al Deportivo Cali y ahora queda la incógnita: ¿Júnior será su próxima víctima?

En Santa Fe se fueron en blanco. El equipo se armó pensando en pelear por la Copa Libertadores y la Liga Postobón pero no se cumplió. Habrá que analizar cuántos de los 14 jugadores que llegaron como refuerzos deben continuar. Lo que se debe reconocer es que Wilson Gutiérrez ha puesto al cuadro cardenal en los primeros lugares del fútbol nacional, acostumbrado a pelear por títulos y a eso se le debería dar continuidad.