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Camilo Charria, exfutbolista de Santa Fe, fue detenido en Sogamoso, Boyacá, tras participar de un robo a tres apartamentos junto a una mujer. La captura se dio en flagrancia luego de que las autoridades los sorprendieran saliendo del edificio con varios objetos de valor.
Charria ya tenía antecedentes por este tipo de delitos en Miami, Estados Unidos, donde fue arrestado por hurtos residenciales. En ese entonces, integraba una banda de origen colombiano que operaba entre Nueva York y el sur de Florida.
El bogotano de 26 años jugaba de extremo y pasó por las divisiones menores de Santa Fe. No encontró un lugar en el primer equipo y quedó libre en 2022. Antes estuvo a préstamo en Tigres durante el 2020, su último año activo como futbolista profesional.
Con la camiseta cardenal, Charria vio acción en el primer semestre de 2019, cuando estuvo convocado en siete partidos del fútbol profesional colombiano. Solo vio acción en dos de ellos, uno por Liga y otro por Copa. No se afianzó en el plantel.
Su momento más destacado ocurrió en un amistoso entre el León y Atlético Nacional, disputado en Bogotá, también 2019. En ese partido Ronaldinho, leyenda del fútbol brasileño, jugó para el conjunto bogotano. Charria marcó y celebró con el astro.
Volviendo a los hechos de esta semana, Charria y María Fernanda Bravo —la mujer que fue capturada junto a él— tenían, según las autoridades, joyas, anillos, celulares y otros objetos de valor que les fueron confiscados en el arresto.
Los dos detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación y se esperan las audiencias de legalización de captura e imputación de cargos.
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