Teo Gutiérrez le dio la victoria a Júnior sobre Santa Fe en el Metropolitano

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Dos errores en una jugada es algo que podría considerarse como un golpe de suerte para el rival. Primero fue el mal rechazo de Fainer Torijano, después la pelota que le rebotó a Dixon Rentería y eso le permitió a Teófilo Gutiérrez, en cámara lenta, poner el gol con el que Júnior venció a Santa Fe en el estadio Metropolitano.

Eso sí, antes de ese remate, Teo habilitó a Víctor Cantillo con una gran visión, y su compañero remató tan potente que Leandro Castellanos apenas pudo poner sus manos para atajar la pelota. Ya después vino la sucesión de equivocaciones. Y ante un delantero como Gutiérrez no se puede cometer una equivocación así (gol 200 para el barranquillero como profesional).

Julio Avelino Comesaña respiró, los hinchas del cuadro tiburón también, pues Gabriel Fuentes, el impulsivo Fuentes, dejó a su equipo con un hombre menos desde el 44’, y obligó a que el cuadro barranquillero se agrupara para evitar que Santa Fe tuviera espacios. Por fortuna, los cambios le salieron a Comesaña y el conjunto cardenal, que no jugó mal, se fue apagando y, por ende la ilusión del empate, incluso de la primera victoria en este torneo.

El rojo bogotano lo intentó, con Jefferson Duque en par ocasiones en la primera parte, después con Maicol Balanta. Sin embargo, Sebastián Viera no falló, tuvo una noche perfecta y limpia. Tapó lo que tenía que tapar y eso fue golpeando de a poco la moral de los jugadores santafereños que fueron siempre para adelante, pero que se estrellaron al final con el uruguayo.

Cuatro años después Júnior volvió a ganarle a Santa Fe en Barranquilla, y con un hombre menos y sin tener las opciones más claras, sí las suficientes para quedarse con los tres puntos. Planteamiento inteligente de Comesaña que le cerró las líneas a un oponente que terminó yendo a los tropezones.

Teo, por su parte, igualó a Nelson Pacheco como el tercer goleador histórico del su equipo (81 tantos) y demostró una vez más que no necesita correr como todos sino estar en el lugar indicado para dejar su marca.

Por el lado de Santa Fe, la tristeza de perder un encuentro así, de dejar escapar aunque sea un punto y el peso de sumar seis fechas sin conocer el triunfo, de no poder abandonar el último lugar de la tabla.