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Solo 76 días después de su llegada, la leyenda del fútbol alemán Jürgen Klinsmann, entrenador del Hertha Berlín, anunció este martes su dimisión, al considerar que no tiene el apoyo suficiente por parte del club, en lucha por no descender.
"Como entrenador, necesito confianza de las personas implicadas para esta tarea, que no está todavía terminada", escribió el técnico de 55 años en su página oficial de Facebook.
"En la lucha contra el descenso, la unidad, la cohesión y la concentración son en esencia los elementos más importantes. Si no están garantizados, no puedo explotar mi potencial como formador y no puedo asumir mis responsabilidades", añadió el antiguo delantero.
Según el diario popular Bild, Klinsmann quería esclarecer lo más rápido posible su futuro con el equipo de la capital alemana, después de haber firmado un contrato únicamente hasta el final de la presente temporada.
La directiva quería esperar a ver la evolución del equipo esta temporada antes de renovarle, lo que no gustó al campeón del mundo en 1990.
Su decisión ha tomado a contrapié al club. "Estamos sorprendidos por esta noticia esta mañana", señaló el director deportivo Michael Preetz, sobre todo por "la cooperación y confianza" durante el periodo de fichajes en el que no hubo "ninguna señal en este sentido".
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Alexander Nouri, asistente de Klinsmann, será entrenador interino del equipo hasta que las directivas decidan su reemplazo.
Fichado a finales de noviembre para reemplazar a Ante Covic, el antiguo seleccionador alemán había tenido un efecto positivo, con varias victorias antes de la tregua invernal, incluida una ante el Bayer Leverkusen por 1-0.
Pero tras las vacaciones los resultados han sido decepcionantes, con una derrota 4-0 en casa ante el Bayern Múnich y la eliminación en la Copa de Alemania contra el Schalke.
La derrota 3-1 en casa ante el Mainz el sábado llevó al equipo a la 14ª plaza, a solo seis puntos del descenso.
Klinsmann, que jugó en el Inter de Milán, Bayern Múnich y Mónaco entre otros, fue 108 veces internacional y marcó 47 goles, ganando el Mundial de Italia 90 y la Eurocopa de Inglaterra en 1996.
Luego fue seleccionador alemán entre 2004 y 2006, alcanzando las semifinales de aquel Mundial, y de Estados Unidos (2011-2016); ganando la Copa de Oro 2013, donde logró meter al combinado norteamericano en los octavos de final del Mundial de Brasil 2014, pero no clasificó para Rusia 2018, lo que le costó el puesto.