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Brasil no pasó del empate sin goles ante Inglaterra, este martes en un amistoso de preparación del Mundial 2018 disputado en Wembley, en el primer partido de su seleccionador Tite contra una de las potencias europeas.
Tras ganar 3-1 a Japón el miércoles en Lille, Brasil cerró su gira de noviembre con un empate ante un equipo inglés que a pesar de las numerosas bajas, entre ellas sus estrellas Dele Alli y Harry Kane, fue capaz de sujetar al cinco veces campeón mundial.
Brasil saltó a Wembley con el once de gala de la etapa de Tite, que arrasó en la clasificación sudamericana, dispuesto a dar un golpe sobre la mesa en su primer partido ante una de las grandes naciones europeas.
Pero, a pesar de que la 'Seleçao' hizo un buen trabajo colectivo en defensa, presionando la salida de balón de Inglaterra, en ataque se mostró espesa y falta de inspiración.
Falta de electricidad
"Un equipo proponía juego, tratando de presionar alto y manejar el balón. El otro defendía más, de manera compacta y esperando un error para contraatacar. A pesar de que tuvimos menos oportunidades que en otros partidos, tuvimos las mejores. No recuerdo dos ocasiones de ellos que nos asustaran", analizó Tite.
Cuando el balón llegaba a la mediapunta el juego se ralentizaba. Neymar y Coutinho, los agitadores del ataque, se topaban con un equipo local bien colocado y solidario.
En una de las pocas acciones en las que consiguieron imprimir velocidad al juego Neymar trianguló con Coutinho y Dani Alves en la derecha antes de filtrar con la izquierda por encima de la defensa un balón a Gabriel Jesus, que se escoró demasiado y se quedó sin ángulo (23).
Inglaterra, a diferencia de Brasil, jugó con una alineación marcada por las bajas. Además, el joven Ruben Loftus Cheek, de 21 años, sufrió una lesión muscular (35). Le sustituyó Jesse Lingard.
"En términos de corazón, resiliencia y espíritu, lo hemos dado todo. Hemos jugado contra dos de los mejores equipos del mundo y no concedimos goles, es algo sobre lo que construir", dijo el seleccionador local Gareth Southgate, haciendo referencia al empate sin goles ante Alemania el sábado.
Solanke y Abraham
Al comienzo de la segunda mitad Brasil intentó acelerar su fútbol. Con Inglaterra descolocada (46) Neymar aguantó el balón hasta que Coutinho le tiró el desmarque, pero Joe Hart salió a los pies del jugador del Liverpool.
Por los Tres Leones Marcus Rashford, la joven esperanza del United (20 años), lo intentaba por todo el frente de ataque, pero el entramado defensivo brasileño, con Casemiro como líder, frenaba sus aspiraciones.
El despertar brasileño fue un espejismo. Rápidamente incidió en los mismos defectos que en la primera mitad, especialmente Neymar, bajo de revoluciones y con tendencia a acaparar el balón durante demasiado tiempo.
La mejor ocasión de la 'Canarinha' llegó en el 75, cuando Fernandinho, que había entrado en la segunda parte, tomo la iniciativa y su disparo lejano tocó el poste.
Para Inglaterra le mejor noticia en este cierre fue la entrada en juego Dominic Solanke (75), el talento de 20 años, que debutó con una gran jugada que desarboló a la defensa sudamericana.
Brasil cerró el partido con otra gran ocasión. Neymar encontró a Paulinho y el medio del Barcelona sacó un cañón que Hart despejó como pudo con el pecho.
Justo antes del pitido final, Marcelo perdió un balón por intentar jugar de tacón y Kyle Walker centró al área. Tammy Abraham, otra promesa (20 años) que acababa de entrar en juego, rozó el balón del triunfo.