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Inter vs. Napoli fue partido que estuvo marcado por la tensión, la violencia y los insultos racistas en contra del defensor senegalés Kalidou Koulibaly, lo que hizo que algunos entrenadores y jugadores se unieran para criticar lo sucedido dentro y fuera del estadio de San Ciro.
Uno de los primeros en hablar sobre el tema fue Cristiano Ronaldo. El delantero portugués condenó lo sucedido en San Ciro, el pasado miércoles. "En el mundo del fútbol se necesita siempre educación y respeto. No al racismo y a cualquier forma de discriminación", escribió en las redes sociales. A esas palabras se unieron las de Luciano Spalletti, técnico del Inter de Milán. "Condeno con fuerza lo ocurrido el miércoles. Llegó el momento de decir 'basta' con el racismo, la discriminación o cánticos que evocan tragedias el pasado", afirmó en rueda de prensa.
Los insultos racistas de parte de la afición del Inter provocaron el jueves la decisión del Juez Deportivo de la Serie A de castigar a los milaneses a disputar dos partidos a puerta cerrada, más un tercero sin los aficionados del fondo ultra. Una decisión aceptada por Spalletti, quien sin embargo lamentó el hecho de que se penalice a la gran mayoría de los aficionados, los que acuden al estadio con alegría, amor y sentimiento. "Parar el partido en caso de cánticos racistas podría ser una solución, pero ahora hay que hacer algo distinto, hay que empezar un proyecto. Los casos de racismo siguen siendo muchos y no solo se producen contra Koulibaly. Lo sentimos mucho por él y se lo dijimos todos", aseguró.
De igual manera, Eusebio Di Francesco, técnico de la Roma, aseguró que se encuentra de acuerdo con interrumpir los partidos en caso de cánticos racistas. "Yo estoy con Carlo (Ancelotti), totalmente. Él lleva tiempo proponiendo esto y lo comparto completamente. Si el Estado no logra reglamentar estas problemáticas, tenemos que dar nosotros una respuesta importante. Estoy de acuerdo con él", dijo Di Francesco en la rueda de prensa previa al duelo del Roma contra el Parma.
En este momento el código deportivo italiano no prevé la interrupción obligatoria de un partido en casos de cánticos racistas. El artículo 62 del código asegura que la decisión de la eventual interrupción de un encuentro puede ser ordenada por un responsable del orden público presente en el estadio, que debe estar pendiente de los cánticos y de las manifestaciones racistas e informar al colegiado. "Muchas veces la gente no va al estadio por cultura deportiva o para animar a su equipo, sino para ofender. Hemos hablado mucho, hemos ido a dar clases en las escuelas, pero estas cosas no cambian en los estadios", lamentó Di Francesco.
Por su parte, Gennaro Gattuso, técnico del Milan, definió este viernes como cuatro imbéciles a los aficionados del Inter de Milán que dirigieron el miércoles los cánticos racistas. "Creo que es correcto parar el partido, pero hay que entender que son cuatro imbéciles, no todo el estadio. Lamentablemente no es la primera vez que ocurre algo de este tipo. Somos todos iguales, hace falta respeto", dijo Gattuso en la rueda de prensa previa al duelo liguero del Milan contra el Spal de Ferrara. "Hay que tener el coraje para parar el partido y retirar al equipo. Pero no critiquemos excesivamente nuestro país, he visto otros 'países civiles' lanzar plátanos", prosiguió el preparador del Milan.
A su vez, Massimiliano Allegri, técnico de la Juventus, consideró que la manera de acabar con el racismo es sensibilizar y educar a los niños en las escuelas. "El presidente federal tomó su posición (seguir jugando los partidos). Hay que tomar medidas preventivas y tenemos la ocasión para cambiar la dinámica. Para hacerlo hacen falta hechos y no palabras. Esperemos que haya llegado el momento de tomar medidas preventivas", dijo Allegri en la rueda de prensa previa al Juventus-Sampdoria. Con medidas preventivas, el técnico del club turinés se refirió a educar a los niños, a los que definió como "el futuro de Italia", y transmitir un ejemplo positivo. "Para mí no hay que parar los partidos. Es el orden público que puede interrumpir un partido. Dicho esto, no tolero ninguna forma de racismo ni de insulto sobre tragedias o muertos", afirmó Allegri.
Este caso de racismo y de violencia dio la vuelta al mundo y dio un revuelco en Italia. Este viernes la Fiscalía de Milán castigó a siete ultras del Inter de Milán involucrados el miércoles en las peleas con unos hinchas del Nápoles en las afueras del estadio San Siro de Milán con el "Daspo", la prohibición de acceder a los recintos deportivos. El Fiscal de Milán, Marcello Cardona, castigó a los siete ultras, de edad comprendida entre los 18 y los 48 años, con un Daspo extendido no solo a nivel nacional sino a nivel internacional, según informan los medios locales.