La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) anunció este miércoles a través de un escueto comunicado que todavía no inició "ningún tipo de gestión" ni diálogo con algún entrenador tras la salida de Jorge Sampaoli como seleccionador de la Albiceleste.
#Comunicado Tras la salida de Jorge Sampaoli, la AFA informa que al día de la fecha no se ha iniciado ningún tipo de gestión ni se ha dialogado con ningún entrenador. El próximo 31 de julio, en reunión de Comité Ejecutivo, la dirigencia evaluará los pasos a seguir. pic.twitter.com/qo492V2BWv
— AFA (@afa) July 18, 2018
Pékerman, el argentino más colombiano
Una lesión en la rodilla acabó con su carrera deportiva, apenas a los 28 años, por lo que tuvo que regresar a Argentina. Compró un taxi y recorrió las calles de Buenos Aires para ganarse la vida. Llevando y trayendo pasajeros, amasaba el sueño de dirigir. Se sumaría entonces a Ricardo Trigilli, por entonces en Estudiantes de Caseros, y con él pasaría a Chacarita y luego a Argentinos. Y aunque Trigilli salió, Pékerman se mantuvo y asumió las divisiones menores. Y una gran carrera comenzaba entonces.
Un año más tarde, en Qatar, ganó un Mundial de la categoría juvenil para Argentina, luego de una sequía de 12 años, con una generación notable: Juan Pablo Sorín, Walter Coyette y Ariel Ibagaza. Dos años después, se llevó el Sudamericano y también el torneo orbital con una brillante camada de jugadores: Esteban Cambiasso, Juan Román Riquelme y Lionel Scaloni. Y aunque en 1999, en la cita de Nigeria, no pudo revalidar el título, volvería al trono mundial juvenil en 2001, en Argentina, llevándose la copa con una actuación demoledora y unos nombres que sobresalían: Pablo Aimar, Javier Saviola, por nombrar algunos.
Su próximo gran reto sería la selección mayor, con la que haría una brillante eliminatoria y llegaría a los cuartos de final del Mundial de Alemania. Aunque Grondona intentó persuadirlo para que continuara en el cargo, Pékerman decidió que un ciclo había terminado. Dejó a Messi en el banco ante los germanos, en uno de los peores errores en la historia del fútbol argentino. La eterna imagen de Leo con pies estirados y mirada resignada nunca se borrará de la memoria del país albiceleste.
Entonces dirigió a Toluca y a Tigres, en México, hasta que decidió tomarse un tiempo de descanso. Y se cansó de rechazar ofertas. Todo cambió el 4 de enero de 2012. Se sentó al banquillo de la selección de Colombia. Y la alegría ha sido de bando a bando. Porque él tampoco había durado tanto en un cargo que no fuera con equipos juveniles. El argentino más colombiano.