Brillante debut en Liga de Yerry Mina en empate 0-0 entre Barcelona y Getafe

Y llegó el día en el que un defensor hizo que los ojos de Colombia voltearan a Barcelona, así como en los últimos años lo hicieron siguiendo a James Rodríguez con el Real Madrid o a Falcao con el Mónaco. Las puertas del Camp Nou se abrieron de par en par para que Yerry Mina debutara en la Liga de España. Lo hizo como titular frente al Getafe. En un partido que empataron 0-0 y en el que el entrenador del equipo catalán, Ernesto Valverde, no pudo contar con Samuel Umtiti (suspensión), Gerard Piqué y Thomas Vermaelen (lesión). 

Mina estuvo acompañado por Lucas Digne. Juntos conformaron la pareja de defensas centrales. Por los costados estuvieron Sergi Roberto (derecha) y Jordi Alba (izquierda), para completar la línea de cuatro que con el pasar del juego se convirtió en una muralla, con torres y estandartes, como si estuvieran defendiendo un castillo en la edad media, que tuvo como principal enemigo al delantero Ángel, quien con sus embestidas buscaba sembrar el miedo en la trinchera catalana. Y como a toda muralla, le encontraron sus filtros.

Posicionalmente, Mina siempre estuvo bien, seguro. Se convirtió en una opción de pase constante y apoyó a la salida de su equipo. Fue importante en ese aspecto porque el Getafe también levantó una muralla, que detuvo al general catalán, Lionel Messi. La magia del argentino no fue factor en el encuentro de este domingo. Los defensores visitantes se doblaban para detenerlo, para no dejarlo pensar. En pocas ocasiones le dieron centímetros, pero nunca los suficientes para ser determinante. De igual manera, borraron a Luis Suárez y a Coutinho.

Aunque el Barcelona fue más incisivo en el segundo tiempo, la aplicación y el orden del Getafe -tercer equipo menor goleado en la Liga- apagó las ilusiones de gol de un cuadro blaugrna, que buscó de media distancia, con centros y pelota quieta. Cuando la ofensiva catalana lograba superar a los defensas siempre aparecieron las manos de Guaita para ahogar los gritos de gol. De esa ofensiva también hizo parte Mina, quien al 77 tuvo una de las más claras del partido. Saltó, superó a la muralla que había levantado la zaga y de cabeza mandó el balón cerca al palo izquierdo del cancerbero del Getafe.

Y llegó el día en el que un defensor hizo que los ojos de Colombia voltearan a Barcelona, así como en los últimos años lo hicieron siguiendo a James Rodríguez con el Real Madrid o a Falcao con el Mónaco. Las puertas del Camp Nou se abrieron de par en par para que Yerry Mina debutara en la Liga de España. Lo hizo como titular frente al Getafe. En un partido que empataron 0-0 y en el que el entrenador del equipo catalán, Ernesto Valverde, no pudo contar con Samuel Umtiti (suspensión), Gerard Piqué y Thomas Vermaelen (lesión). 

Mina estuvo acompañado por Lucas Digne. Juntos conformaron la pareja de defensas centrales. Por los costados estuvieron Sergi Roberto (derecha) y Jordi Alba (izquierda), para completar la línea de cuatro que con el pasar del juego se convirtió en una muralla, con torres y estandartes, como si estuvieran defendiendo un castillo en la edad media, que tuvo como principal enemigo al delantero Ángel, quien con sus embestidas buscaba sembrar el miedo en la trinchera catalana. Y como a toda muralla, le encontraron sus filtros.

Posicionalmente, Mina siempre estuvo bien, seguro. Se convirtió en una opción de pase constante y apoyó a la salida de su equipo. Fue importante en ese aspecto porque el Getafe también levantó una muralla, que detuvo al general catalán, Lionel Messi. La magia del argentino no fue factor en el encuentro de este domingo. Los defensores visitantes se doblaban para detenerlo, para no dejarlo pensar. En pocas ocasiones le dieron centímetros, pero nunca los suficientes para ser determinante. De igual manera, borraron a Luis Suárez y a Coutinho.

Aunque el Barcelona fue más incisivo en el segundo tiempo, la aplicación y el orden del Getafe -tercer equipo menor goleado en la Liga- apagó las ilusiones de gol de un cuadro blaugrna, que buscó de media distancia, con centros y pelota quieta. Cuando la ofensiva catalana lograba superar a los defensas siempre aparecieron las manos de Guaita para ahogar los gritos de gol. De esa ofensiva también hizo parte Mina, quien al 77 tuvo una de las más claras del partido. Saltó, superó a la muralla que había levantado la zaga y de cabeza mandó el balón cerca al palo izquierdo del cancerbero del Getafe.