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Oro puro, eso es lo que tiene Independiente Santa Fe con Yerry Mina, un defensa central de 1,93 metros de estatura nacido hace 21 años en Guachené, Cauca, quien fue la gran figura en la serie ante Oriente Petrolero de Bolivia, en la que los cardenales se impusieron 6-1 en el marcador global, gracias al triunfo 3-1 en la ida y la victoria 3-0 de este jueves en El Campín. Estos resultados les permitieron clasificarse a la fase de grupos de la Copa Bridgestone Libertadores de América, en la que enfrentarán a Cerro Porteño de Paraguay, Corinthians de Brasil y Cobresal de Chile.
Mina, de poco trabajo defensivo en los 180 minutos de la doble confrontación, fue el mejor atacante albirrojo y marcó tres goles, uno en Santa Cruz de la Sierra y dos en Bogotá.
El zaguero iba a ser convocado por el técnico de la selección de Colombia, José Pékerman, para el microciclo de la próxima semana, pero por solicitud del club capitalino no apareció en la lista para poder disputar, el martes, el primer duelo del Grupo 8 del torneo continental, frente a Cerro Porteño, en El Campín.
Como se esperaba después de la exhibición albirroja en Bolivia, el de este jueves fue un partido de puro trámite, en el que Santa Fe ratificó su superioridad porque lo encaró con la seriedad y responsabilidad que se requería, pues al fin y al cabo había mucho en juego: por el paso a la siguiente fase de la Libertadores recibirá US$1’800.000, además de lo que recaude en los tres partidos que juegue como local.
Bastó media hora para que el equipo de Gerardo Pelusso lograra vulnerar la defensa visitante, aunque ya se había acercado con peligro en varias ocasiones. A los 32 minutos el venezolano Luis Manuel Seijas cobró un tiro de esquina al corazón del área y Mina anticipó a su marcador para cabecear y mandar el balón al fondo de la red.
Seis minutos después llegó la segunda anotación en una acción calcada. Un nuevo lanzamiento de Seijas y Mina otra vez con la frente para sentenciar la serie por la vía aérea, en la que desde hace ya varias temporadas Santa Fe es muy fuerte.
En el complemento el técnico local decidió mandar a la cancha a Ómar Pérez y Yulián Anchico, quienes fueron suplentes de lujo, y a Anthony Otero, quien se estrenó como anotador con el equipo albirrojo al convertir el tercer gol, a los 73 minutos.
Y eso que el 3-0 fue un resultado corto para la superioridad que mostró Santa Fe, así como corto fue el 3-1 en la ida.
Por cuarta temporada consecutiva el conjunto cardenal jugará la fase de grupos de la Libertadores y esta vez, después de dos títulos locales, dos Superligas y la Copa Sudamericana, el gran sueño es el título del torneo de clubes más importante del continente.
Difícil saber hasta dónde llegará el rojo bogotano, pero más difícil aún es impedir que sus hinchas se ilusionen y sueñen con levantar la Copa.