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De la mano del inglés John Barnes, el galés Ian Rush y el entrenador y leyenda del Liverpool, el escocés Kenny Dalglish, los ‘reds’ gritaban campeón de la primera división del fútbol en Inglaterra por última vez en la temporada 1989-1990. Para ese entonces, Alex Ferguson conseguiría su primer título al frente del Manchester United en su tercer año como entrenador de los ‘diablos rojos, el Real Madrid tenía en sus vitrinas seis ‘orejonas’ de la Champions League y Colombia se preparaba para gritar el gol más importante en los mundiales en junio de aquel año.
Este jueves 25 de junio de 2020, el equipo dirigido por Jurgen Klopp volvió a alcanzar la gloria en el torneo local con 86 puntos, 23 más que su perseguido inmediato -el Manchester City de Pep Guardiola- y con siete fechas de sobra antes del final de la temporada. En caso de ganar los encuentro pendientes podrían alcanzar los 107 puntos y destronar a los ‘citizens’ con el récord de mayor cantidad de unidades logradas en una campaña.
Aunque haber ganado el torneo continental más importante de Europa el año pasado contra el Tottenham significó un alivio tras 14 años sin ganar un torneo internacional y ocho sin levantar alguno de los campeonatos que disputa año tras año (el último fue la copa de la Liga en 2012), los hinchas rojos aún anhelaban romper esa mala racha en la liga inglesa. Desde la reinvención del torneo, que en la temporada 1992-1993 empezó a llamarse Premier League, el Liverpool no ha logrado escribir su nombre en ese trofeo.
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Con una filosofía de juego ofensivo, pero una solidez defensiva por la firmeza y elegancia del guardameta carioca Alisson Becker y el central neerlandés Virgil van Dijk que permite la permanente salida de sus laterales, el escocés Andrew Robertson y el inglés Trent Alexander-Arnold, sumado a una constante presión al rival por parte de todo el equipo y un tridente de ataque explosivo que aprovecha las virtudes individuales del egipcio, Mohamed Salah; el senegalés, Sadio Mané; o del brasileño, Roberto Firmino, también logran encontrar una química envidiable para cualquier otro equipo. Estos rasgos han convertido al nuevo campeón de Inglaterra a ser una de las escuadras más temidas del Viejo Continente y del mundo.
Es posible que la dinastía de Klopp recién esté comenzando y que los de Liverpool vuelvan a portar el emblema del equipo más ganador del país, pero esto recién comienza. Con apenas un encuentro perdido frente al Watford en febrero de 2020, los ‘reds’ no podrán alcanzar la marca de Arsene Wenger y el Arsenal de la 2003-2004 -equipo que terminó sin ninguna derrota en toda la temporada- pero podrá treparse a la cima del deporte por la calidad de juego y el nivel que ha demostrado desde hace varias temporadas.
Así lo celebró el equipo en sus redes sociales:
Tell the world…
— Liverpool FC (@LFC) June 25, 2020
We are Liverpool, champions of England. pic.twitter.com/altgWn1Wda