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Los amantes del fútbol no ven la hora de volver a ver en acción al tridente ofensivo de la ‘Naranja Mecánica’: Arjen Robben, Wesley Sneijder y Robin Van Persie. Sí, ese trío de jugadores que dejó en ridículo al actual campeón del mundo y a uno de los mejores arqueros de la historia, Iker Casillas. El nuevo objetivo de Holanda es Australia, un equipo que poco demostró ante Chile y que salió perdiendo por 3 goles a 1.
Holanda, como siempre, llegó con el favoritismo de ser uno de los opcionados al título, pero tras la presentación del pasado jueves se demostró que la mano del técnico Louis van Gaal ha sido fundamental. No sólo porque marcó un perfecto esquema 5-2-3, sino que también demostró que Holanda tiene varias facetas. Rápidas transiciones defensa-ataque, tenencia del balón, individualidades y un férreo sistema defensivo son las armas de los tulipanes.
Para el partido contra Australia, que al parecer jugará con el mismo equipo que utilizó frente a Chile, los holandeses realizarán un solo cambio. Para dar más volumen de ataque, el volante de contención Jonathan de Guzman le dará paso al delantero Jeremain Lens, para formar un esquema 4-3-3. “Van Persie, Robben, Sneijder... tienen un gran ataque, pero sabemos lo que tenemos que hacer. Hay que hacer una defensa colectiva. Es importante desde nuestro punto de vista”, señaló Ange Postecoglou, entrenador de la selección australiana.
Los jugadores holandeses dicen estar con los pies en la tierra. Saben que nada está escrito y mucho menos tras el primer partido, ya que en anteriores competiciones el destino, tal vez la suerte, les ha jugado malas pasadas. Además de los subcampeonatos mundiales, uno de los recuerdos más presentes para la actual Holanda es la Eurocopa 2008, en la que ganaron dos espectaculares encuentros —3-0 a Francia y 4-1 a Italia—, pero luego cayeron ante Rusia en cuartos de final.
Fuera de la gran atmósfera futbolera que rodeará este partido en Porto Alegre, la ciudad más al sur en Brasil, el clima parece ser el ideal para ambos conjuntos. No será el calor intenso que se vive en el norte ni la pesada humedad en las ciudades del interior que quedan al lado de la selva. Las temperaturas van a ser más bajas y se va a poder correr más. Se va a jugar mucho más rápido. No habrá el calor del partido anterior”, agregó Postecoglou.