Jorge Luis Pinto, el apasionado por la táctica que llevó a Costa Rica al Mundial

Cuando el colombiano Jorge Luis Pinto fue nombrado entrenador de la selección de Costa Rica que disputaría el pase al Mundial de Brasil, muchos aficionados y periodistas deportivos torcieron la nariz.

Aún estaba fresca en la memoria la eliminatoria del Mundial de Alemania 2006 cuando Pinto era el técnico de la tricolor y fue sustituido en medio de reclamos del público de que el equipo jugaba mal, y de la presión de algunos medios de comunicación que clamaban por el regreso de Alexandre Guimaraes, el técnico que había llevado a Costa Rica a la copa de Japon y Corea 2002.

Su despido, después de un empate sin goles frente a Trinidad y Tobago, truncó los sueños de Pinto Afanador de llegar al Mundial de Alemania al frente de una selección.

Parecía que sus éxitos con clubes como el Alianza Lima y Liga Deportiva Alajuelense, a los que hizo campeones, no se podían repetir en selecciones porque en 2007 sería cesado como entrenador de la selección de su país, Colombia.

Aún así, la dirigencia del fútbol costarricense volvió a confiarle la selección para la eliminatoria a Brasil 2014, con tan buen tino que el combinado centroamericano clasificó en forma anticipada después de vencer a México y Estados Unidos, los rivales más pintados de la región.

Pinto, un hombre estudioso, metódico y apasionado por la táctica, apostó al talento de jugadores como Cristian Bolaños, Joel Campbell y Bryan Ruiz, combinado con el orden táctico de volantes mixtos como Celso Borges y Yeltsin Tejeda.

Del "villano" que fue despedido en 2005 no quedó ni el recuerdo después de que Pinto llevó a los ticos a ganar su boleto al Mundial con un juego ordenado en defensa y contundente en el ataque.

Lucha de toda una vida

Con ello, coronó el sueño de toda una vida dedicada al fútbol.

"He luchado toda mi vida por ir a un Mundial y hoy lo he logrado, es la lucha de toda mi vida. Más que una felicidad, es la respuesta a mi trabajo, al esfuerzo, a la dedicación", dijo un emocionado Pinto el día en que Costa Rica logró su clasificación a Brasil, el 10 de setiembre de 2013.

Sobre el técnico del seleccionado costarricense, su colega colombiano Gabriel Ochoa Uribe destacó su don de liderazgo, su facilidad de expresión y su fuerte personalidad.

"No da un paso sin estructura táctica", comentó Ochoa en un artículo en el diario El País de Cali, Colombia. "Es una persona que todo lo planifica, un hombre estudioso. No tendría en este momento todos los triunfos que ha conseguido si no fuera ordenado en este aspecto" táctico.

Nacido el 16 de diciembre de 1952 en el municipio colombiano de San Gil, Pinto comenzó su formación deportiva en su país, donde obtuvo su licenciatura en educación física, y posteriormente se especializó en fútbol en Brasil y Alemania, dos países con estilos de juego opuestos, pero que en la cabeza de Pinto resultan complementarios.

Admirador de entrenadores como el catalán Pep Guardiola, el portugués José Mourinho y el italiano Cesare Prandelli, Pinto no teme encarar el llamado "grupo de la muerte" del Mundial, con los ex campeones Uruguay, Italia e Inglaterra.

"Vamos a entrar a competir de tú a tú, no le vamos a tener miedo a ningún rival por más peso futbolístico que tengan", manifestó tras conocer en diciembre a sus rivales de primera fase en el Mundial.

Cuando el colombiano Jorge Luis Pinto fue nombrado entrenador de la selección de Costa Rica que disputaría el pase al Mundial de Brasil, muchos aficionados y periodistas deportivos torcieron la nariz.

Aún estaba fresca en la memoria la eliminatoria del Mundial de Alemania 2006 cuando Pinto era el técnico de la tricolor y fue sustituido en medio de reclamos del público de que el equipo jugaba mal, y de la presión de algunos medios de comunicación que clamaban por el regreso de Alexandre Guimaraes, el técnico que había llevado a Costa Rica a la copa de Japon y Corea 2002.

Su despido, después de un empate sin goles frente a Trinidad y Tobago, truncó los sueños de Pinto Afanador de llegar al Mundial de Alemania al frente de una selección.

Parecía que sus éxitos con clubes como el Alianza Lima y Liga Deportiva Alajuelense, a los que hizo campeones, no se podían repetir en selecciones porque en 2007 sería cesado como entrenador de la selección de su país, Colombia.

Aún así, la dirigencia del fútbol costarricense volvió a confiarle la selección para la eliminatoria a Brasil 2014, con tan buen tino que el combinado centroamericano clasificó en forma anticipada después de vencer a México y Estados Unidos, los rivales más pintados de la región.

Pinto, un hombre estudioso, metódico y apasionado por la táctica, apostó al talento de jugadores como Cristian Bolaños, Joel Campbell y Bryan Ruiz, combinado con el orden táctico de volantes mixtos como Celso Borges y Yeltsin Tejeda.

Del "villano" que fue despedido en 2005 no quedó ni el recuerdo después de que Pinto llevó a los ticos a ganar su boleto al Mundial con un juego ordenado en defensa y contundente en el ataque.

Lucha de toda una vida

Con ello, coronó el sueño de toda una vida dedicada al fútbol.

"He luchado toda mi vida por ir a un Mundial y hoy lo he logrado, es la lucha de toda mi vida. Más que una felicidad, es la respuesta a mi trabajo, al esfuerzo, a la dedicación", dijo un emocionado Pinto el día en que Costa Rica logró su clasificación a Brasil, el 10 de setiembre de 2013.

Sobre el técnico del seleccionado costarricense, su colega colombiano Gabriel Ochoa Uribe destacó su don de liderazgo, su facilidad de expresión y su fuerte personalidad.

"No da un paso sin estructura táctica", comentó Ochoa en un artículo en el diario El País de Cali, Colombia. "Es una persona que todo lo planifica, un hombre estudioso. No tendría en este momento todos los triunfos que ha conseguido si no fuera ordenado en este aspecto" táctico.

Nacido el 16 de diciembre de 1952 en el municipio colombiano de San Gil, Pinto comenzó su formación deportiva en su país, donde obtuvo su licenciatura en educación física, y posteriormente se especializó en fútbol en Brasil y Alemania, dos países con estilos de juego opuestos, pero que en la cabeza de Pinto resultan complementarios.

Admirador de entrenadores como el catalán Pep Guardiola, el portugués José Mourinho y el italiano Cesare Prandelli, Pinto no teme encarar el llamado "grupo de la muerte" del Mundial, con los ex campeones Uruguay, Italia e Inglaterra.

"Vamos a entrar a competir de tú a tú, no le vamos a tener miedo a ningún rival por más peso futbolístico que tengan", manifestó tras conocer en diciembre a sus rivales de primera fase en el Mundial.