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Liga de Quito venció por 3-2 al onceno argentino Independiente de Avellaneda en partido de ida de las semifinales de la Copa Sudamericana-2010 jugado el jueves en la capital ecuatoriana, una victoria que dejó mal sabor a los de casa por el peso de los goles que recibió.
Los tantos de Liga fueron anotados por el delantero uruguayo Juan Manuel Salgueiro (44) y los volantes Miller Bolaños (49) y Néicer Reasco (57). Independiente descontó por intermedio de los atacantes Andrés Silvera (58) y Lucas Mareque (64).
La revancha se jugará el próximo jueves en Avellaneda, y el ganador enfrentará en la final al vencedor de la llave entre los brasileños Goiás y Palmeiras, que ganó 1-0 de visita el encuentro de ida el miércoles en Goiania (centro).
El cuadro argentino sorprendió a Liga, defensor del título, con un juego ordenado y gran despliegue físico, pese a los 2.850 metros de altitud de Quito.
Los visitantes pisaron desde muy temprano el área rival con Fernando Godoy Mareque y Nicolás Cabrera a la cabeza, e hicieron sentir su poderío ofensivo como lo había presagiado el técnico de los de casa, el argentino Edgardo 'Patón' Bauza.
Gracias a los goles anotados este jueves, a Independiente le bastará con ganar por la mínima diferencia en la revancha para clasificar a su primera final de un torneo internacional desde la Supercopa Sudamericana de 1995.
Antes del primer gol, Liga apenas creó un par de situaciones con Ulises de la Cruz y Barcos.
En tanto, los 'Diablos rojos' (este jueves con uniforme azul) amenazaban con Godoy. El mediocampista conectó al minuto 12 el primer disparo al arco, pero el portero Francisco Cevallos controló.
Mientras, a los 25, tras tiro de esquina, Facundo Parra empalmó un remate con dificultad en el área local y reclamó penal.
Como si la altura no le hiciera mella, el plantel de Independiente administraba mejor el balón que el anfitrión, que no hallaba el camino para batir a Hilario Navarro.
Al minuto 31, un misil de Godoy, luego de un tiro libre de Cabrera, golpeó en el travesaño, silenciando a los hinchas albos en el estadio Casa Blanca.
Sin embargo, a los 44 Salgueiro encontró la fórmula para inclinar la balanza. El uruguayo eludió a Roberto Battión y descargó un misil que se coló por el ángulo superior derecho, sin que Navarro pudiera hacer nada.
El tanto parecía un premio exagerado para el local por lo mostrado en la cancha. En el arranque de la complementaria, Independiente avisó que no bajaría los brazos: el ariete Andrés Silvera conectó de primera un pase de Parra y el balón pasó cerca del palo.
Pero enseguida, al 49, los azucena aumentaron la cuenta. Desde el área, Barcos tocó a Salgueiro y éste a Bolaños -que había entrado para la segunda parte-, definiendo de derecha a la salida del golero.
Liga vivía su mejor pasaje, y lo demostró con la tercera conquista a los 57. Tras una jugada colectiva, Barcos le dejó la pelota a Néicer Reasco, que definió con un remate cruzado ante la salida de Hilario.
El equipo argentino daba la impresión de pagar la factura de la altitud. No obstante, Silvera devolvió la esperanza, convirtiendo desde la media luna al rincón izquierdo.
El tanto fue una inyección de ánimo para la visita, que enmudeció el Casa Blanca a los 64. Mareque vio salido al meta y soltó un latigazo de derecha que se coló por el ángulo superior.
Parra tuvo el empate, pero no alcanzó a empalmar en el área. La fortaleza de los visitantes también fue palpable en el arco al 72, cuando Navarro salvó milagrosamente un doble remate en el área.