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Benfica dio un golpe sobre la mesa este martes y se impuso por la mínima diferencia (1-0) al Bayern Múnich, en el cierre de la fase de grupos del Mundial de Clubes. Este resultado le permitió a los portugueses quedarse con el primer lugar del Grupo C.
La cita entre lisboetas y bávaros tuvo lugar en el estadio Bank of America, en Charlotte, al este de los Estados Unidos. El único gol de la tarde fue obra del noruego Andreas Schjelderup, quien definió de primera tras conectar un centro rastrero de su compatriota Frederik Aursnes dentro del área.
Bayern Múnich, que ya estaba clasificado a los octavos de final tras vencer a Boca Junior en la segunda fecha de la fase de grupos, encaró este compromiso con una nómina mixta. Al ver que los lusos se pusieron en ventaja, su técnico, Vincent Kompany, mandó a la cancha a varios de sus titulares.
A pesar de que en los últimos minutos el gigante alemán asedió el área del Benfica y tuvo varias llegadas claras, no tuvo efectividad en el arco rival y se tuvo que conformar con el segundo lugar del Grupo C. Los germanos serán rivales del Flamengo (Brasil) en los octavos de final.
Boca, eliminado del Mundial de Clubes
Boca Juniors, bajo la dirección técnica de Miguel Ángel Russo, necesitaba golear por más de seis goles al Auckland City y que el Bayern le diera una mano con una victoria sobre el Benfica. Ambos partidos arrancaron a la misma hora, pero una tormenta interrumpió el duelo entre argentinos y neozelandeses.
El xeneize se puso en ventaja al minuto 26 en una acción de balón parado que concluyó con autogol de Nathan Garrow. El portero del campeón de Oceanía tuvo la mala suerte de que la pelota, tras dar en el palo luego de un cabezazo de Lautaro Di Lollo, rebotó en su torso y terminó al fondo de la red.
A pesar de controlar la pelota y tener jugadores de mayor jerarquía, Boca sufrió para encontrar espacios, mientras que los jugadores de Auckland City cada vez más se tuvieron la confianza de encontrar espacios en territorio rival, tanto así que lograron marcar su primer gol en el torneo.
Los oceánicos equilibraron el marcador al minuto 52, cuando el colombiano Jerson Lagos cobró un tiro de esquina desde el costado derecho que su compañero, Christian Gray, convirtió en el empate gracias a un cabezazo certero que venció la resistencia de Agustín Marchesín.
El partido fue suspendido poco después de manera provisional debido al protocolo de tormenta eléctrica. Tras la pausa de más de 50 minutos, Boca trató de recuperar la ventaja, pero no lo consiguió y se despidió del Mundial de Clubes sin conocer la victoria.
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