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El argentino Paulo Dybala impulsó este sábado el triunfo por 2-0 del Juventus contra el Udinese en la Serie A italiana, pero no celebró su diana, en medio de las polémicas por su renovación de contrato.
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La Joya firmó el gol del 1-0 en el minuto 19 con un elegante control y zurdazo potente al fondo de las mallas. No sonrió ni celebró con el resto de sus compañeros y envió una mirada seria hacia la grada de honor del Allianz Stadium, donde estaba sentada la directiva juntina.
El argentino, cuyo contrato expira el próximo junio, sigue sin renovar pese a los varios encuentros de la directiva con su representante.
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Una renovación de contrato que parecía bien encarrilada se envolvió en las dudas tras las declaraciones del directivo juventino Maurizio Arrivabene en los prolegómenos de la Supercopa italiana perdida por el Juventus el pasado miércoles ante el Inter.
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“Habíamos dicho que nos veríamos con los jugadores en febrero para ver los resultados conseguidos. Cada uno tiene que ganarse su sitio y demostrar su valor. Cada uno tiene que hacer su trabajo, de los jugadores a los directivos, y se le juzga por lo que hace”, dijo Arrivabene antes de la Supercopa.
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El delantero argentino respondió con su gol este sábado, en un partido que el Juventus sentenció en la segunda mitad por medio del estadounidense Weston McKennie.
El equipo de Massimiliano Allegri tiene 41 puntos y es quinto, momentáneamente igualado con el Atalanta, cuarto, aunque con dos partidos más.