Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Para cualquier delantero, marcar cuatro goles en un mismo partido es un sueño que muy pocas veces se convierte en realidad. Sin embargo, el sábado en El Campín, Fernando Uribe lo consiguió. Además, no solo anotó su primer póquer como jugador profesional, sino que le dio a Millonarios una victoria —4-0 ante Fortaleza— que no conseguía desde la segunda fecha de la Liga Postobón II, cuando había derrotado 1-0 a La Equidad como visitante.
“Estoy muy emocionado. Es la primera vez que lo consigo”, dijo el goleador de 26 años de edad. “Sabíamos que no estábamos pasando por un buen momento, pero hicimos un gran trabajo, necesitábamos un triunfo así”, agregó.
Uribe llegó a Millonarios en junio para cumplir con una tarea casi titánica: reemplazar con sus goles a Dayro Moreno, quien en poco tiempo se había convertido en un ídolo de la hinchada albiazul.
Una tarea que no le ha resultado para nada fácil, y más porque su llegada no fue como él lo esperaba. Tuvo que recuperarse de una lesión muscular. Cuando reapareció como titular del cuadro bogotano en la Copa Postobón, se volvió a resentir. Trabajó en lo físico y en lo mental, se entrenó fuertemente durante varias semanas para reaparecer con el equipo que en ese entonces dirigía el español Juan Manuel Lillo. Lo hizo y de a poco fue ganando ritmo de competencia.
Aunque los resultados no eran los esperados —Millonarios registraba 14 fechas sin ganar, tanto en Liga como Copa y Sudamericana—, el delantero pereirano, a pesar del bajón futbolístico del equipo, era uno de los que más se esforzaban dentro del terreno de juego y el sábado fue uno de los más destacados del equipo.
“Mejoramos la atención y la concentración en la parte defensiva. Veníamos trabajando en eso, nos estaban anotando muy rápido, nos tocaba comenzar a remontar y se hacía difícil. Sabíamos que debíamos ampliar el marcador, pero lo principal era mantener el resultado. Gracias a Dios se me abrió el arco completamente, las opciones que tuve fueron adentro. Ojalá sigamos por este camino”, expresó Uribe, quien anotó por primera vez con Millonarios en la Liga, el 16 de agosto en el empate 1-1 frente al Deportivo Pasto. Luego le marcó a Águilas Doradas y el sábado ante Fortaleza logró, después de 17 años y dos meses, un póquer de goles para el elenco embajador en el torneo (la última vez lo había hecho Ricardo El Gato Pérez ante el Pereira).
“La verdad, nunca salgo a recriminar nada, porque el fútbol da muchas vueltas. Trabajo de la mejor manera para aportarle a mi equipo. Siempre salgo con las mismas ganas, con entrega, sacrificio, a darlo todo por los colores de este equipo y eso no se negocia con nadie”, expresó Fernando Uribe, quien ya suma diez gritos con Millonarios: seis en Liga, dos en Copa Postobón y dos en Sudamericana. Y ahora, basándose en su trabajo y buenas actuaciones, espera meterse en el corazón de la hinchada azul, para ser un delantero referente del club.