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El empresario multimillonario ruso Alisher Usmánov ha prestado 300 millones de rublos (unos 5,6 millones de dólares) a la Unión del Fútbol Ruso (UFR) para que pueda afrontar el pago de salarios atrasados al técnico del equipo nacional, el italiano Fabio Capello.
Usmánov, miembro del consejo patrocinador del comité organizador del Mundial de Rusia 2018, volvió a prestar dinero a la UFR para saldar la deuda con el seleccionador, al igual que ya hizo a comienzos del pasado mes de febrero, cuando puso a disposición de la federación unos 6 millones de dólares para el mismo fin.
"Comparto la preocupación del ministro de Deportes ruso (Vitali Mutkó). La decisión del comité ejecutivo de la UFR debe tomarse en base a criterios deportivos, capaces de mejorar sustancialmente la calidad y equilibrio del juego" de la selección, dijo Usmánov, citado por su gabinete de prensa.
Mutkó aseguró recientemente que la destitución de Capello "se está discutiendo" y que al respecto "ya se han tomado algunas decisiones".
Usmánov, sin embargo, no aclaró si su préstamo persigue saldar la deuda con Capello para proceder luego a su destitución del cargo, que por otra parte se da por hecha en los medios deportivos rusos.
La reciente derrota de Rusia ante Austria en el partido clasificatorio para la Europa 2016, que prácticamente condena a la selección de este país a la tercera plaza del Grupo G, en el mejor de los casos, ha puesto en jaque la permanencia del técnico italiano, criticado ya después del mal papel de los rusos en el pasado Mundial de Brasil.
Capello es el seleccionador mejor pagado del mundo gracias a una nómina de 11 millones de dólares al año.