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Contundente. No sólo el Independiente Medellín fue certero dentro del terreno de juego; también lo fue su técnico, Hernán Torres, en la rueda de prensa posterior a la victoria de su equipo 4-1 sobre Millonarios en El Campín. Además de hablar del buen rendimiento de sus dirigidos en el campo, fue directo cuando se le preguntó por su salida del club embajador.
“Estaré siempre agradecido con la hinchada de Millonarios. La llevo en mi alma y corazón. Mi paso por este club marcó mi vida y mi historia. Esta afición se merece cosas grandes y sé que va a mejorar. Tienen que unirse más y salir adelante. Tienen grandes jugadores y un buen cuerpo técnico”, expresó el estratega tolimense, y agregó, refiriéndose a su sorpresiva salida del club capitalino el año pasado: “De Millonarios me fui porque Juan Carlos Ortiz me echó”.
Una decisión que hasta el día de hoy nadie ha entendido. Sobre todo, porque el supuesto proyecto deportivo español por el que habían apostado los directivos de Millonarios terminó mal. El estratega Juan Manuel Lillo y el director deportivo José Portolés pasaron con más pena que gloria. Sus resultados deportivos no fueron los esperados y la contratación de jugadores no estuvo acorde con las necesidades del club; un error de los directivos que le está costando caro al equipo en el campeonato.
Cuando quedan cuatro jornadas para que finalice la fase regular de la Liga Postobón II, Millonarios marcha en el puesto 13, con 16 puntos. Para clasificar necesita casi un milagro: ganar todos los partidos que le faltan (Cali, Alianza Petrolera, Uniautónoma y Tolima). Sin embargo, y pese a haber levantado su nivel ante Fortaleza y Patriotas, el golpe de nocaut que recibió el pasado sábado en Bogotá lo dejó al borde de la eliminación.
Esta vez, el planteamiento táctico no le funcionó a Ricardo Lunari. Sin el panameño Román Torres, quien se encuentra con la selección de su país, Millonarios salió con una línea de tres, que evidenció, una vez más, la falta de jugadores de categoría en su plantel.
Y eso lo aprovechó muy bien Hernán Torres, quien puso a sus mejores hombres para penetrar la frágil defensa albiazul. “Creo que estuvo en la aplicación de los jugadores; me entendieron el mensaje y lo aplicaron. Ellos no pudieron hacernos daño por los costados, ni con Luis Mosquera ni Anderson Plata nos pudieron ganar. Controlamos a Millonarios, lo atacamos y le pudimos marcar goles”, sentenció.
Con la victoria, Medellín sumó 26 unidades en la tabla de posiciones y quedó muy cerca de la clasificación.
“Vamos a ir paso tras paso. Falta un punto para asegurar los cuadrangulares. Todavía no hemos clasificado, así que primero tenemos que hacer la tarea. La hinchada siempre ha creído en este equipo. Poco a poco vamos consiguiendo cosas importantes. Lo bueno es que, tanto en lo futbolístico como en lo administrativo, van marchando muy bien las cosas”, concluyó el técnico del poderoso.
En cambio, las cosas no terminaron bien para Millonarios. Los hinchas que asistieron a El Campín, aunque apoyaron a Ricardo Lunari después de la derrota, se fueron lanza en ristre contra los directivos. Y no es para menos: sus malos manejos en la parte administrativa (déficit de $7.000 millones) y la deportiva (pocos refuerzos) han ocasionado este descalabro futbolístico que lo tiene al borde del nocaut. Fue necesaria la intervención de la policía para calmar los ánimos de los hinchas que insultaban a los directivos en el palco de Millonarios.