La foto

Resultaría más fácil cuadrar una docena de micos para un retrato que conseguir unión entre los 36 presidentes de equipos de fútbol colombiano. Esa foto quizá se intente captar después del 20 de junio, fecha fijada para saber si llegan dólares por la anhelada señal internacional de televisión

Es increíble, todo por la democracia, que no piensen los citados señores en el juego mismo. Las discrepancias y la escandalera ligada al billete. Ni esperanzas de ser sede del Mundial Femenino, ni ayudas tangibles a los árbitros, quienes continúan trabajando a destajo, sin contrato ni garantías sociales.

Las personas pasan y las empresas quedan. Es hora de pensar en la entidad y no en mezquinos intereses políticos y personales. Es patético que Eduardo Dávila, dueño del Unión Magdalena, la emprenda contra Eduardo Méndez, su antiguo arrendatario, todo porque uno quería a Carlos Silva como técnico y el otro un candidato distinto. Detalles así pululan en estos días en un fútbol manejado a las patadas y manga por hombro.

Prefiero destacar la intención de exjugadores tumaqueños como Willington Ortiz, Gambeta Estrada, Léider Preciado, Harry Castillo, Carlos Mesa, Carlos Rendón, William Matamba y otros más, quienes desean ayudar al pueblo que los vio nacer. La campaña se llama “Un gol por Tumaco”. Las donaciones se pueden consignar en la cuenta corriente n.° 894994008-814 de Bancolombia, diócesis de Tumaco.Las donaciones en alimentos no perecederos se deben hacer en un centro de acopio en la calle 37 sur, n.° 70B-05, barrio Carvajal, en Bogotá.

Quienes deben estar contentos son los empresarios y representantes de jugadores, porque la FIFA acaba de autorizar a un jugador a militar en tres equipos distintos en la misma temporada.

Por lo visto y aunque entre los ministerios de Salud y Deportes siguen bananeando con el protocolo, se presume que los deportes individuales podrán iniciar sus trabajos mucho antes que los deportes colectivos, lo que insinúa que quizás en la primera semana de agosto rodara el balón en nuestros estadios, cuya evaluación no resultó la esperada. Es decir, sirven pero no tanto.

Lo único cierto, viendo los juegos de Europa, sin público, es la cantidad de cambios y novedades en el futuro inmediato. Ah, se me quedaba este nuevo estudio: aparte del cociente intelectual, tan conocido, es preciso buscar en los jugadores el cociente emocional. Debo estudiar para comprender y poder difundir este mecanismo de medición. ¿La foto? Ya casi.