El maratón de Nueva York fue galardonado este miércoles con el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes, al ser considerada como la "carrera más popular" de este tipo en el mundo. “Es un evento que combina perfectamente el deporte, el espíritu ciudadano y una enorme repercusión mediática por lo que empezó a resultar atractivo para algunos de los mejores especialistas del mundo en esta distancia”, destacó la Fundación Príncipe de Asturias.
En su primera edición, llevada a cabo en 1970, esta competición contó con tan solo 127 corredores, que pagaron 1 dólar por la inscripción, y de los cuales apenas 55 cruzaron la meta tras recorrer los 42,195 kilómetros reglamentarios. El gran salto de la prueba se produjo en 1976, cuando su creador, Fred Lebow, modificó el recorrido alrededor del Park Drive del Central Park, en la isla de Manhattan, y lo extendió a los cinco distritos de la ciudad, incluyendo Staten Island, Brooklyn, Queens y el Bronx. Ese año participaron 2.090 atletas, entre ellos el bicampeón olímpico de Maratón Frank Shorter, quién fue animado por la multitud.
Desde entonces, el Maratón neoyorquino -integrado en el World Marathon Major con los de Boston, Chicago, Tokio, Berlín y Londres - no ha parado de crecer. En 2013 finalizaron la prueba más de 50.000 corredores, lo que lo ha convertido, según la Fundación Príncipe de Asturias, en el Maratón más multitudinario del mundo pues cuenta con la participación de cerca de 9.000 voluntarios y congrega a más de dos millones de espectadores.