Análisis: Las claves del título de Caimanes en el béisbol colombiano
Capacidad de recuperación, ofensiva encendida, efectividad en el pitcheo y 15 errores defensivos de Vaqueros de Montería, explican la remontada de la novena de Barranquilla.
Gustavo Adolfo Acuña*
Caimanes volvió a coronarse en la Liga Profesional de Béisbol por séptima vez en este siglo. La novena contó con la participación de siete jugadores que juegan o jugaron en las Grandes Ligas.
Los dirigidos por el manager José Mosquera se reforzaron para esta temporada con jugadores como Julio Vivas (lanzador), Harold Ramírez (jardinero), Tito Polo (jardinero), David Holmberg (lanzador), Evan Mendoza (jugador de cuadro), Randy Consuegra (lanzador), que fueron importantes para la obtención del título 11°.
A pesar de esos fichajes, el más importante se dio durante el campeonato. El refuerzo para la Serie Final fue el pitcher dominicano, Eduar López, que ganó dos juegos y fue galardonado con el MVP de la final.
Estas son cuatro razones que llevaron a Caimanes a su consagración.
Capacidad de recuperación
Caimanes tuvo que superar múltiples obstáculos tras perder los juegos 1, 3 y 4, y estar abajo en la serie 3-1. Su manager estaba en su primera experiencia como dirigente de la novena de Barranquilla, sin embargo, José Mosquera demostró que puede mantener unido a sus dirigidos y no permitió que tiraran la toalla.
Mosquera, de 33 años, es una persona ganadora. En su etapa como jugador ganó cinco títulos con el equipo reptil y como timonel había logrado subtítulos con los Toros de Sincelejo.
Le puede interesar: Caimanes es el nuevo campeón del béisbol colombiano
“Este es el equipo que queremos mantener. Uno que se divierte y que anote carreras. Siento que en los primeros juegos hubo un poco de presión y se les olvidó los detalles pequeños. La actitud ahora es muy positiva”, manifestó Mosquera, tras ganar el quinto juego. Desde allí, Caimanes siguió su racha, llevándose la victoria en los juegos seis y siete.
Ofensiva encendida desde el quinto juego
En los juegos que perdió Caimanes, solo pudieron anotar seis carreras, insuficientes para poder ganar un campeonato. La ofensiva comenzó a tirar chispas en el quinto encuentro apoyada por la producción del grandes ligas Dilson Herrera, quien cerró la serie con un promedio de .370, 10 imparables, un doblete, seis carreras anotadas y cuatro impulsadas.
La otra estrella con el bate fue el sanandresano Tito Polo, quien logró promedio de .321, nueve sencillos, un doblete, anotó cinco carreras e impulsó dos.
Le puede interesar: Estos son los mejores bateadores de todos los tiempos
También, destacar el trabajo de Harold Ramírez, y de Christian Correa, que pegó el único cuadrangular de la final.
La entrada a la alineación del bateador Christian Correa fue una jugada maestra del mánager, ya que el jugador fue factor de cambio y produjo con el bate.
Desde el quinto juego, tres en total, Caimanes conectó 31 hits, frente a 26 en los primeros cuatro juegos de la serie.
Efectividad en el pitcheo
Lo máximo que Vaqueros de Montería pudo anotar en un partido fueron cinco carreras, lo que ocurrió en el quinto juego (ganó 10-5). Esto demuestra el gran trabajo de los lanzadores de Caimanes.
En los últimos dos juegos de la serie, los bateadores de Vaqueros no pudieron descifrar los lanzamientos de sus rivales, y solo anotaron dos carreras.
Sobresale la labor del jugador más valioso de la final, Eduar López. El dominicano estuvo intratable en los dos partidos que lanzó. Sus estadísticas fueron dos victorias, efectividad de 0.00 (le anotaron dos carreras sucias), 11.0 entradas completas, solo permitió nueve imparables, recetó nueve ponches y los contrarios solo le batearon .209.
Las dos carreras de Vaqueros se dieron en la parte alta de la primera entrada del juego seis. En los siguientes 17 episodios a los lanzadores de Caimanes no les anotaron carreras. En estos innings, el manager Mosquera utilizó nueve serpentineros.
También se vio el trabajo de los lanzadores David Holmberg, con experiencia en la MLB; Luis de Ávila, Jalen Miller y Ronald Ramírez.
Errores de la defensiva de Vaqueros
La novena de Montería comenzó muy bien, no obstante, no pudo mantener el nivel. Los dirigidos por Ángel Tovar cometieron 15 errores en toda la serie, algo inaudito que condenó sus aspiraciones. La peor actuación se dio en el juego cinco con la misma cantidad de errores.
*De la Fundación Color de Colombia.
Caimanes volvió a coronarse en la Liga Profesional de Béisbol por séptima vez en este siglo. La novena contó con la participación de siete jugadores que juegan o jugaron en las Grandes Ligas.
Los dirigidos por el manager José Mosquera se reforzaron para esta temporada con jugadores como Julio Vivas (lanzador), Harold Ramírez (jardinero), Tito Polo (jardinero), David Holmberg (lanzador), Evan Mendoza (jugador de cuadro), Randy Consuegra (lanzador), que fueron importantes para la obtención del título 11°.
A pesar de esos fichajes, el más importante se dio durante el campeonato. El refuerzo para la Serie Final fue el pitcher dominicano, Eduar López, que ganó dos juegos y fue galardonado con el MVP de la final.
Estas son cuatro razones que llevaron a Caimanes a su consagración.
Capacidad de recuperación
Caimanes tuvo que superar múltiples obstáculos tras perder los juegos 1, 3 y 4, y estar abajo en la serie 3-1. Su manager estaba en su primera experiencia como dirigente de la novena de Barranquilla, sin embargo, José Mosquera demostró que puede mantener unido a sus dirigidos y no permitió que tiraran la toalla.
Mosquera, de 33 años, es una persona ganadora. En su etapa como jugador ganó cinco títulos con el equipo reptil y como timonel había logrado subtítulos con los Toros de Sincelejo.
Le puede interesar: Caimanes es el nuevo campeón del béisbol colombiano
“Este es el equipo que queremos mantener. Uno que se divierte y que anote carreras. Siento que en los primeros juegos hubo un poco de presión y se les olvidó los detalles pequeños. La actitud ahora es muy positiva”, manifestó Mosquera, tras ganar el quinto juego. Desde allí, Caimanes siguió su racha, llevándose la victoria en los juegos seis y siete.
Ofensiva encendida desde el quinto juego
En los juegos que perdió Caimanes, solo pudieron anotar seis carreras, insuficientes para poder ganar un campeonato. La ofensiva comenzó a tirar chispas en el quinto encuentro apoyada por la producción del grandes ligas Dilson Herrera, quien cerró la serie con un promedio de .370, 10 imparables, un doblete, seis carreras anotadas y cuatro impulsadas.
La otra estrella con el bate fue el sanandresano Tito Polo, quien logró promedio de .321, nueve sencillos, un doblete, anotó cinco carreras e impulsó dos.
Le puede interesar: Estos son los mejores bateadores de todos los tiempos
También, destacar el trabajo de Harold Ramírez, y de Christian Correa, que pegó el único cuadrangular de la final.
La entrada a la alineación del bateador Christian Correa fue una jugada maestra del mánager, ya que el jugador fue factor de cambio y produjo con el bate.
Desde el quinto juego, tres en total, Caimanes conectó 31 hits, frente a 26 en los primeros cuatro juegos de la serie.
Efectividad en el pitcheo
Lo máximo que Vaqueros de Montería pudo anotar en un partido fueron cinco carreras, lo que ocurrió en el quinto juego (ganó 10-5). Esto demuestra el gran trabajo de los lanzadores de Caimanes.
En los últimos dos juegos de la serie, los bateadores de Vaqueros no pudieron descifrar los lanzamientos de sus rivales, y solo anotaron dos carreras.
Sobresale la labor del jugador más valioso de la final, Eduar López. El dominicano estuvo intratable en los dos partidos que lanzó. Sus estadísticas fueron dos victorias, efectividad de 0.00 (le anotaron dos carreras sucias), 11.0 entradas completas, solo permitió nueve imparables, recetó nueve ponches y los contrarios solo le batearon .209.
Las dos carreras de Vaqueros se dieron en la parte alta de la primera entrada del juego seis. En los siguientes 17 episodios a los lanzadores de Caimanes no les anotaron carreras. En estos innings, el manager Mosquera utilizó nueve serpentineros.
También se vio el trabajo de los lanzadores David Holmberg, con experiencia en la MLB; Luis de Ávila, Jalen Miller y Ronald Ramírez.
Errores de la defensiva de Vaqueros
La novena de Montería comenzó muy bien, no obstante, no pudo mantener el nivel. Los dirigidos por Ángel Tovar cometieron 15 errores en toda la serie, algo inaudito que condenó sus aspiraciones. La peor actuación se dio en el juego cinco con la misma cantidad de errores.
*De la Fundación Color de Colombia.