Colombia se toma la pelota dominicana: Luis Felipe Urueta, nuevo mánager del Licey

Luis Felipe Urueta cumplió un gran papel con Colombia en el Clásico Mundial de Béisbol. El entrenador fue clave para que los jugadores asumieran el reto como lo hicieron y demostraran el momento en el que está el béisbol colombiano. Impresionó. Tuvo a dos grandes potencias de este deporte, Estados Unidos y República Dominicana, contra las cuerdas. Vendió cara la derrota.

Esta notable presentación abrió las puertas para que Ernesto Frieri firmara contrato con los Yanquis y Karl Lewis Triana con los Bravos de Atlanta, y para que Urueta se convirtiera en el nuevo mánager del equipo Tigres del Licey, de República Dominicana.

Es la primera vez que un colombiano es nombrado para dirigir una de las grandes ligas invernales que tiene el béisbol profesional. Ya en enero de este año fue nombrado mánager interino del equipo. Sin embargo, el último campeón de la Liga Dominicana de Béisbol confirmó la contratación del barranquillero, quien en la última temporada fue mánager asistente.

Las negociaciones fueron rápidas. El gerente general de los Tigres del Licey, Júnior Noboa, se reunió en Arizona con el staff de los Diamondbacks y obtuvo el permiso para que Urueta, quien fue ascendido este año a coordinador de campo de la organización de Arizona, se hiciera cargo de la dirección del equipo. La respuesta no se demoró y fue positiva.

Ahora el trabajo del colombiano se centrará en contactar a los jugadores pertenecientes a los Tigres del Licey, así como a ejecutivos del béisbol de Grandes Ligas, con los fines de conformar un equipo capaz de retener la corona conquistada la temporada pasada y mejorar su participación en la Serie del Caribe, torneo en el que este año salió por la puerta de atrás después de perder todos los partidos.

Urueta jugó béisbol profesional durante ocho años, que se dividieron entre sucursales de Ligas Menores e Italia. A pesar de que las cosas no salieron como quiso, el gusto de dirigir y enseñar fue creciendo, tal vez siguiendo los pasos de su mamá, Carmela Romano, quien fue profesora en Barranquilla.

En 2008, cuando tomó la decisión de retirarse como profesional, Arizona nuevamente le extendió la mano. Comenzó a dirigir en República Dominicana, fue coordinador de la academia del equipo, después pasó a los Estados Unidos, donde ejerció como coach en clase rookie. En 2015 fue entrenador de tercera en triple A y en 2016 fue nombrado coordinador de Ligas Menores. Llegar a Grandes Ligas no lo desvela. Es joven (tiene 36 años) y sabe que no hay prisa: “Lo que hago me gusta, es importante. Algún día, si se da la oportunidad de estar en las Mayores, pues se evaluará”, dijo el mánager.

El colombiano también ha cosechado éxitos en la Liga Colombiana de Béisbol. Sus dos últimas presentaciones fueron en 2015 y 2016. En la primera condujo al título del torneo nacional a los Leones de Montería, que posteriormente se coronaron campeones de la Serie Latinoamericana. En 2016 dirigió a los Caimanes de Barranquilla y los sacó campeones.

Luis Felipe Urueta cumplió un gran papel con Colombia en el Clásico Mundial de Béisbol. El entrenador fue clave para que los jugadores asumieran el reto como lo hicieron y demostraran el momento en el que está el béisbol colombiano. Impresionó. Tuvo a dos grandes potencias de este deporte, Estados Unidos y República Dominicana, contra las cuerdas. Vendió cara la derrota.

Esta notable presentación abrió las puertas para que Ernesto Frieri firmara contrato con los Yanquis y Karl Lewis Triana con los Bravos de Atlanta, y para que Urueta se convirtiera en el nuevo mánager del equipo Tigres del Licey, de República Dominicana.

Es la primera vez que un colombiano es nombrado para dirigir una de las grandes ligas invernales que tiene el béisbol profesional. Ya en enero de este año fue nombrado mánager interino del equipo. Sin embargo, el último campeón de la Liga Dominicana de Béisbol confirmó la contratación del barranquillero, quien en la última temporada fue mánager asistente.

Las negociaciones fueron rápidas. El gerente general de los Tigres del Licey, Júnior Noboa, se reunió en Arizona con el staff de los Diamondbacks y obtuvo el permiso para que Urueta, quien fue ascendido este año a coordinador de campo de la organización de Arizona, se hiciera cargo de la dirección del equipo. La respuesta no se demoró y fue positiva.

Ahora el trabajo del colombiano se centrará en contactar a los jugadores pertenecientes a los Tigres del Licey, así como a ejecutivos del béisbol de Grandes Ligas, con los fines de conformar un equipo capaz de retener la corona conquistada la temporada pasada y mejorar su participación en la Serie del Caribe, torneo en el que este año salió por la puerta de atrás después de perder todos los partidos.

Urueta jugó béisbol profesional durante ocho años, que se dividieron entre sucursales de Ligas Menores e Italia. A pesar de que las cosas no salieron como quiso, el gusto de dirigir y enseñar fue creciendo, tal vez siguiendo los pasos de su mamá, Carmela Romano, quien fue profesora en Barranquilla.

En 2008, cuando tomó la decisión de retirarse como profesional, Arizona nuevamente le extendió la mano. Comenzó a dirigir en República Dominicana, fue coordinador de la academia del equipo, después pasó a los Estados Unidos, donde ejerció como coach en clase rookie. En 2015 fue entrenador de tercera en triple A y en 2016 fue nombrado coordinador de Ligas Menores. Llegar a Grandes Ligas no lo desvela. Es joven (tiene 36 años) y sabe que no hay prisa: “Lo que hago me gusta, es importante. Algún día, si se da la oportunidad de estar en las Mayores, pues se evaluará”, dijo el mánager.

El colombiano también ha cosechado éxitos en la Liga Colombiana de Béisbol. Sus dos últimas presentaciones fueron en 2015 y 2016. En la primera condujo al título del torneo nacional a los Leones de Montería, que posteriormente se coronaron campeones de la Serie Latinoamericana. En 2016 dirigió a los Caimanes de Barranquilla y los sacó campeones.