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El deporte colombiano está de luto: el triatleta antioqueño Diego Salazar fue atropellado mientras montaba bicicleta en Envigado por un camión. Nuevamente un ciclista fallece en un accidente de tránsito. Las cifras no paran de crecer. El respeto por el pedalista cada vez es menor aunque existen muchas campañas de inteligencia víal, que les piden tener cuidado.
Diego deja un vacío enorme. Su compañero de entrenamientos y amigo, Marlon Ortíz (Mao), lo recuerda como una inspiración para los demás. Como la persona que siempre estaba atenta a sus amigos cuando estaban pasando por momentos difíciles. "Estaba pendiente de todos. Cuando uno tenía un problema nos buscaba, nos mandaba un mensaje o nos hacía una llamada para que cambiaramos el estado de ánimo. Siempre estuvo ahí en las buenas y en las malas", afirmó con un toque de amargura.
Y era claro su sentir: hablar sobre un amigo recién fallecido no es fácil. Es ocultarse la tristeza y controlar las lágrimas y el desazón. Aún así Mao lo hizo con altura y siempre dejó por lo alto el nombre de Diego. "Era un gran deportista. El ejemplo a seguir de Titanes". Ese era el equipo para el que competía, no llevaba más de tres años allí, pero muchos lo admiraban por su compromiso y entrega. "Se destacaba montando bicicleta. Lo hacía muy bien. Madrugabamos a entrenar. Subíamos al alto de Palmas o hacíamos ruta largas. Adicional teníamos en común que éramos Pscicologos y muchas veces nos sentábamos a hablar de temas afines", resaltó.
Mao siempre se destacó por correr. Hizo varios maratones, en una media maratón de Medellín conoció a Diego. "Después cuando me enteré que montaba bicicleta cogimos afinidad. Le decía la moto, porque lo hacía muy bien". Después fue profundizando en la personalidad de su amigo, lo conoció mejor y se dio cuenta de todas las cualidades que lo rodeaban. "Siempre decía que no nos preocuparámos, que todo lo curaba el deporte. Siempre entrenaba. Fue una persona muy conocida en el gremio del triatlón. Participó en la duatlón de Las Palmas. Solo se dedicó al ciclismo desde 2018 y fue cuando se conoslidó en Titanes y ahí formó en un equipo de ciclismo".
Precisamente, con ese equipo participó en la primera edición del Giro de Rigo, en la que quedó campeón por equipos. Una hazaña. Pero no fue la única. También lo hizo subiendo a Palmas, donde Mao dice con seguridad que hizo récord. "Lo subió en 44:53 minutos desde el Country". Tanta era su afición por la bicicleta que tenía dos con apodos: La Morocha y Margaret, a esta última la vendió por Maruja, que era la de ciclomontañismo.
Hoy el deporte colombiano llora a Diego Salazar, le da el último adiós a un hombre comprometido con su familia. Era quien respondía por su mamá, su hermana y su sobrina con quienes vivía en Belén La Nubia, en Medellín. Por esta razón el equipo Titanes hará una rodada conmemorativa en su honor, el domingo. "Vamos a recoger donación voluntaria para ayudarle a la familia con temas de funeraria". Un adiós a un deportista de 40 años que siempre se desvivió por el deporte y sus seres queridos y que ya había hecho sus pinos en la media maratón de Medellín, en varias duatlones, triatlón olímpica y el Ironman de Cartagena en 2016.