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El suizo Roger Federer, número tres mundial, se mostró confiado en lograr un buen resultado en el torneo Masters 1000 de Madrid, que comienza este domingo en la capital española, y dijo no tener miedo a la tierra batida de color azul sobre la que se disputarán los partidos.
Esa arcilla ha provocado una gran polémica en los últimos días, con los principales tenistas del circuito, entre ellos Federer y otras estrellas como el español Rafael Nadal y el serbio Novak Djokovic, mostrándose en contra de su utilización.
"He jugado en ella dos días, pero todavía no en la pista central. Es un poco diferencia que la tierra batida normal, quizás es por es por el efecto visual", comentó el helvético sobre su experiencia con ella.
"Los partidos son bastante diferentes a los entrenamientos. Tengo que esperar para mi partido, entonces ya tendré mi propia opinión".
Federer tendrá de entrada un partido difícil en el torneo madrileño, ya que se medirá al ganador del partido de primera ronda que jugarán el argentino David Nalbandian y el canadiense Milos Raonic.
El suizo ya sabe lo que es ganar el Masters 1000 de Madrid en tierra batida, en 2009, el año en el que conquistó su único Roland Garros, el Grand Slam que se disputa sobre esa superficie.