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Japón debutó en el Clásico Mundial de Béisbol con una notable victoria 11-6 sobre su similar de Cuba. En el estadio Tokyo Dome, de la capital nipona, el seleccionado local fue liderado por su lanzador abridor Ayumu Ishikawa, quien, por cuatro episodios, maniató a la ofensiva isleña a dos imparables, una base por bolas y una carrera. El derecho de 28 años se quedó con la victoria y fue apoyado por la ofensiva, que respondió en momentos claves.
Los bates de la novena japonesa anotaron la primera carrera en la primera entrada cuando después de dos outs Norichika Aoki (único jugador de Grandes Ligas que viste uniforme nipón) conectó doblete y entró en carrera gracias a un hit de Yoshimoto Tsutsugoh frente al abridor cubano Noelvis Entenza.
Los cubanos intentaron reaccionar en la tercera entrada y lograron igualar el compromiso, gracias a doble de Yoelkis Céspedes (el mejor bateador de Cuba, de 5-3) y enorme fly de sacrificio del torpedero Alexander Ayala sobre el que hizo un fildeo espectacular el jardinero central Aoki. Pero el pitcheo relevo de Cuba sucumbió y permitió la ventaja japonesa en el cuarto y en el quinto episodio se vino abajo: con un racimo de cinco carreras los locales equilibraron la balanza a su favor.
Cuba no se dio por vencida y anotó tres en el 7mo inning, llamado de la suerte, con jonrón incluido de Alfredo Despaigne (3-2) y sencillo del emergente Guillermo Avilés. Las últimas anotaciones para los subtitulares del primer Clásico llegaron en el octavo, con el papel protagónico para el antesalista Yurisbel Gracial, autor de un doble con dos en circulación.
El remate de los japoneses llegó con par de carreras más en su penúltima oportunidad al bate y de esta forma sellaron su cuarto éxito frente a una representación de la Isla en cinco enfrentamientos en estos certámenes. Los otros dos integrantes de esta llave B, China y Australia descansaron en esta jornada inaugural, y el miércoles chocarán Cuba y China a primera hora, en tanto japoneses y australianos lo harán en el partido de cierre.