Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
La brillante actuación de Lionel Messi el miércoles pasado, cuando le marcó cinco goles al Bayer Leverkusen alemán, en octavos de final de la Liga de Campeones de Europa, despertó nuevamente la polémica sobre quién es el mejor futbolista de la historia.
La única certeza por ahora es que nació en Suramérica, pues a ese trono aspiran Pelé, Maradona y ahora el 10 del Barcelona.
Otros candidatos, como el hispano-argentino Alfredo Di Stéfano, el francés Zinedine Zidane, el holandés Johan Cruyff, el alemán Franz Beckenbauer, el portugués Eusebio y el brasileño Ronaldo, están un escalón más abajo.
¿Por qué Pelé?
Edson Arantes do Nascimento, Pelé, nació el 23 de octubre de 1940 y con apenas 17 años de edad fue la gran figura de la selección brasileña que conquistó el Mundial de Suecia 1958. Repitió título en Chile 1962, cuando apenas jugó dos partidos, y en 1970, cuando ya maduro, se coronó como rey del fútbol en México.
Jugó entre 1956 y 1977. En 21 años de carrera marcó 1.282 goles, contando partidos oficiales y amistosos. Con su club, el Santos, logró dos Copas Libertadores y dos Intercontinentales, además de seis campeonatos de Brasil y múltiples torneos regionales.
Pelé era un jugador inteligente, astuto. Tenía un físico privilegiado (medía 1,73 metros) y además de cabecear bien, manejaba ambos perfiles.
Aunque siempre fue la figura de su equipo, generalmente estuvo rodeado por otros grandes maestros del balón. El mejor grupo que integró fue el de México 70, considerado hasta hace poco como el mejor de la historia.
Terminó su carrera en el Cosmos de Nueva York y se dedicó a las relaciones públicas y la política. Es una leyenda viviente.
¿Por qué Maradona?
Nadie puso en duda el reinado de Pelé hasta 1986, cuando Diego Armando Maradona, nacido el 30 de octubre de 1960, se consagró en la misma cancha, la del Estadio Azteca.
El Pelusa, que había conducido a la selección sub-20 de Argentina a la conquista del Mundial de la categoría en Japón 1979, hizo lo propio con el equipo mayor. Su magia, complementada por la lucha y el espíritu de sus compañeros, llevó al equipo albiceleste a ganar su segunda Copa Mundo.
En ese torneo marcó el mejor gol de la historia, ante Inglaterra, en cuartos de final, cuando tomó el balón en su propio campo, eludió a seis rivales y decretó el 2-0 parcial. La rivalidad histórica entre esas dos naciones, incrementada tras la Guerra de las islas Malvinas, y un tanto previo con la mano, le dan aún mayor significado a esa anotación.
Cuatro años después, en Italia 1990, Maradona volvió a dar cátedra, pero su equipo cayó en la final ante Alemania.
Polémico, contestatario y muy arrogante, el 10 era casi un dios en Nápoles, la ciudad italiana a la que inscribió en el mapa del fútbol gracias a la conquista de dos ligas locales y una Copa Uefa, a finales de los 80.
Después se hizo pública su adicción a las drogas y protagonizó múltiples escándalos, al punto de que fue sancionado por dar positivo en el Mundial de 1994, en Estados Unidos.
En total marcó 311 goles oficiales entre 1976 y 1997 y conquistó 12 campeonatos. Después se dedicó a la dirección técnica sin resultados relevantes. Con la selección de su país llegó a cuartos de final en Sudáfrica 2010.
¿Por qué Messi?
Lionel Messi nació el 24 de junio de 1987 y debutó con el primer equipo del Barcelona en 2004. Con el club catalán ha conseguido 18 títulos, entre ellos los de tres Ligas de Campeones de Europa, cinco ligas de España y dos Mundiales de Clubes.
Fue goleador y mejor jugador del Mundial Sub-20 de Holanda, en 2005, cuando su selección se llevó la corona. Con la albiceleste también logró el oro olímpico en Pekín 2008 y llegó a cuartos de final en los Mundiales de Alemania 2006 y Sudáfrica 2010.
Lleva 228 goles oficiales con el Barcelona, cuya última versión, con él como figura y Pep Guardiola como técnico, es considerada como la mejor escuadra de todos los tiempos.
Lionel es un tipo tranquilo, callado, que se convierte en una fiera dentro de la cancha. Es rápido, habilidoso y técnico. Es zurdo, pero maneja el perfil derecho y a pesar de su baja estatura, 1,69 metros, también cabecea.
Claro, no ha ganado un mundial de mayores, pero seguramente tendrá al menos dos oportunidades más para lograrlo.
Por ahora, Pelé y Maradona están en la pelea por el título de mejor jugador del mundo en la historia, mientras que Messi sigue demostrando en cada partido que no es de este planeta.