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Leicy Santos volvió a demostrar por qué es una de las jugadoras más talentosas del continente con un gol que quedará grabado en la historia de la Copa América Femenina.
Cuando el partido parecía inclinarse a favor de Brasil, la mediocampista de Córdoba tomó la responsabilidad de ejecutar un tiro libre tras una falta cometida a Linda Caicedo en la frontal del área.
El estadio entero contuvo la respiración mientras Santos acomodaba el balón, y segundos después, la número 10 envió un disparo perfecto, que superó la barrera y se coló en el ángulo, inalcanzable para la portera Lorena.
El gol, convertido al minuto 115, fue un acto de fe y clase en el momento más crítico, pues Colombia había quedado en desventaja tras el tanto de Marta en el primer tiempo extra.
La jugada que originó el tiro libre fue una muestra del ímpetu de Linda Caicedo, quien arrancó desde la mitad de la cancha y fue derribada en una acción desesperada de la zaga brasileña. La ejecución de Leicy no dio espacio a dudas: fue un gol de antología.
El empate 4-4 que firmó Santos desató la locura en el banquillo colombiano, con Ángelo Marsiglia y su cuerpo técnico abrazándose mientras las jugadoras corrían a festejar con su capitana. El estadio de Quito vibró con el grito de gol, y Colombia, que había visto esfumarse el título en el último segundo del tiempo reglamentario, volvía a soñar. El partido se fue a penaltis después de esa acción.
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