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Sergio Alejandro Galván Rey
Especial para El Espectador
Muchas veces cuesta resumir las situaciones de la vida en una sola palabra y para definir lo que ha sido esta temporada para mí no fue la excepción. Pero después de pensarlo una y otra vez, creo que contradictoria es el término.
Por un lado, y sin duda el más importante, no se lograron los resultados a nivel colectivo con América, con las dos eliminaciones para cuadrangulares. Pero por el otro, alcancé un objetivo que tenía planteado hace rato, como era el de superar el récord de máximo goleador de fútbol profesional colombiano.
Aquella tarde-noche de abril pasado tenía mucha esperanza de que podía llegar a mi gol 218 y así faltara poco tiempo para terminar el partido (restaban cinco minutos de juego), algo dentro de mí me hacía pensar que lo iba a lograr y llegó como caído del cielo literalmente, porque lo convertí de cabeza, así que estuve más convencido que nunca de que debía mostrar en mi pecho el mensaje de agradecimiento a quien hizo posible todo: “La gloria y la honra son para Dios”.
Ya después fui en busca de la camiseta que llevaba estampada la cifra alcanzada y se la mostré a la tribuna, porque hasta en eso me sentí bendecido, ya que nada mejor que compartir semejante dicha con una hinchada que desde el primer día me acogió con cariño y respeto.
Al conseguirlo, el orgullo se hace inolvidable, pero con él se genera de paso la responsabilidad de haber entrado a la historia, algo impensado años atrás, cuando llegué a Colombia con la simple ilusión de que me fuera bien y triunfar. Así que hoy puedo decir que este país me dio más de lo que esperaba y por eso soy un agradecido con Dios.
Y bueno, lograr este registro con una camiseta como la del América, representativa no sólo en Colombia sino a nivel internacional, le da un significado más que especial, porque aparte de la situación complicada de la institución, fueron muchos factores los que se afrontaron y eso da una satisfacción extra.
Por esa y muchas razones más, siempre voy a tener un sentimiento de gratitud hacia ‘La Mechita’, que me brindó la posibilidad de seguir en el fútbol profesional colombiano y donde me han tratado como si hubiese hecho toda mi carrera acá, ya que al margen de lo deportivo, la parte humana cuenta tanto o más.
Eso me ha fortalecido mucho y la verdad me siento con muchas ganas de seguir jugando, no sufro de ninguna lesión y creo que mi garganta puede aguantar muchos más gritos, los cuales no fueron demasiados en este segundo semestre, en el que no tuve la continuidad deseada por decisiones técnicas, pero eso sí, en cada entrenamiento trabajé con la mentalidad de ser el mejor y los partidos, fuera en los últimos minutos, de titular o ingresando para los segundos tiempos, siempre los afronté con la misma intensidad.
Está claro que los años pasan, pero cada quien sabe si su cuerpo le da o no y en mi caso creo tener las suficientes energías para seguir de cortos por un buen tiempo, decisión que he compartido familiarmente y en la que he encontrado apoyo absoluto.
Ahora llega el momento de compartir con la familia los instantes que la profesión le priva a uno, pero antes de pasar fin de año en Argentina junto a mi señora y los hijos, deseo definir mi situación para 2011. Estoy a gusto en América por como me han tratado y este lunes tendré reunión con el presidente para saber si me quedo o me voy, pero algo está claro: todavía hay Galván para rato.
Así los veo
Once Caldas
A favor Fue un equipo que no arrancó bien y mostró carácter para revertir esta situación, y eso es lo que se necesita también para jugar una final y ganarla, así que deseo que sea el campeón.
En contra Debe ser más equilibrado, porque uno lo ve de mitad hacia delante muy compacto y claro, pero asimismo debe serlo en defensa. De lograrlo será candidato fuerte.
Atlético Nacional
A favor Tiene tradición en finales y eso cuenta. Posee buenos jugadores y en esta clase de partidos, donde se necesita jerarquía, siempre la pone y por eso se hace un rival peligroso para cualquiera.
En contra Ha sido irregular en su rendimiento y de ahí que no luzca todo lo vistoso que esperan sus hinchas y el mismo equipo. Tiene entonces una linda oportunidad de mostrar más.
Deportes Quindío
A favor Un equipo que con base en el gran trabajo de su técnico ha logrado hacerse fuerte como conjunto, por encima de las individualidades que tiene y eso le puede dar la opción de pelear.
En contra No tiene esa presión y responsabilidad de otros en el grupo, pero en la medida en que los jugadores se concienticen de esta oportunidad, pueden llegar lejos.
Cúcuta Deportivo
A favor En todas sus líneas cuenta con las características de un equipo fuerte, que se para bien y de local se hace complicado, factores definitivos en un cuadrangular bastante parejo.
En contra Entró en la última fecha y ahora deberá saber manejar esa misma presión para afrontar la instancia más importante del torneo.