El Banco Mundial aprobó un préstamo por US$750 millones para Colombia. Los recursos buscan garantizar la continuidad y el acceso a los servicios de infraestructura básica de los hogares y empresas más vulnerables, y fomentar el desarrollo de infraestructura resiliente y sostenible en respuesta a la crisis generada por la COVID-19.
La primera fase del programa se inició en 2020, con el apoyo de un crédito del Banco Mundial de US$500 millones. Esta segunda fase del programa se centrará en el cierre de las brechas de infraestructura de energía, transporte y desarrollo digital. También apoyará reformas encaminadas a mantener el acceso a financiamiento privado para el desarrollo de infraestructura a largo plazo.
Los responsables de la coordinación e implementación de este proyecto serán el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, el Ministerio de Minas y Energía, el Ministerio de Transporte, el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, y el Departamento Nacional de Planeación.
“Esperamos que este programa acelere la transición hacia sistemas de transporte y energía más limpios y resilientes en beneficio de todos los colombianos y el medio ambiente. Asimismo, esperamos que se mejore el acceso a la infraestructura digital en zonas rurales, lo que permitirá reducir las desigualdades”, dijo Ulrich Zachau, director del Banco Mundial para Colombia y Venezuela.
Por su parte, Luis Alberto Rodríguez, director general del Departamento Nacional de Planeación, dijo que “esta operación es de gran relevancia para el financiamiento del Presupuesto General de la Nación del año 2021. Con la misma, el Banco Mundial acompaña en una segunda fase los esfuerzos más relevantes que hemos puesto en marcha para la reactivación económica de nuestra economía, específicamente en materia de infraestructura resiliente y sostenible”.